Por Víctor Hugo GuelGónzalez
El Libro de Génesis, es conocido como el libro de los “Orígenes” o “De los comienzos”; y en él podemos ver con claridad, cómo es que Dios llevó a cabo toda la creación, cómo él creo todo lo que existe, incluyendo al ser humano; y es aquí que se puede establecer el plan divino para todo hombre y mujer.
En Génesis 1:27 al 31, encontramos verdades bíblicas que seguramente nos van a permitir ver las cosas como Dios quiere que las veamos. Para comenzar, el versículo 27 dice: “Y creó Dios al hombre a su imagen, a la imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.” Es Dios el creador del hombre; no fue el resultado de la evolución, del Big Ban, de cualquier teoría que el hombre pudiera inventar y suponer. La Escritura nos dice que quien nos creó fue Dios, y lo hizo a su imagen; y el versículo añade algo que nos debe dar certidumbre en medio de tanta polémica, en medio de tanto engaño, en medio de tantas ideas y puntos de vista, dice: “Varón y hembra los creó.” Todo ser humano sobre la faz de la tierra, o es varón, o es hembra, no hay de otra, no hay algo intermedio, no hay algo alternativo, no hay algo aparte de ello; y aún en el ADN de una persona se puede comprobar con el sólo hecho de que si es hombre, su cromosoma es XY, y si es una mujer será XX, así de simple y sencillo; y esto, con el respaldo de lo que dice el versículo 31, el cual dice: “Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.
Continuando con el pasaje, la Biblia dice al comienzo del versículo 28: “Y los bendijo Dios…” Y es el plan de Dios para cada uno, es que Dios nos quiere bendecir. Ahora, sé que por causa de la desobediencia del hombre, esto no ha sucedido; pero nunca hay que olvidar que de entrada lo que el Señor desea es bendecirnos, y su bendición es la que enriquece y no añade tristeza con ella; y claro, cuando un hombre, una mujer, toma la decisión de obedecer, de poner en práctica su Palabra, de hacer la voluntad de Dios, habrá bendición de parte de Él, y es algo que todos necesitamos, en nuestra vida, en nuestro matrimonio, nuestra familia, en todas las áreas de nuestra vida, y gracias a Dios, que su plan y propósito es bendecirnos.
Siguiendo con el pasaje, dice: “Y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra…” Otra parte importante del plan de Dios es la reproducción; es hombre y mujer dentro del matrimonio fructifiquen y se multipliquen, es decir, que tengan hijos y así evitar la extinción del hombre.
Déjeme concluir con esto en cuanto al plan de Dios; en la actualidad, hay gente que deja de lado estas cosas, y en vez de hacer la voluntad de Dios, buscan hacer lo que ellos quieren, olvidando que fue Dios quien los creó, que Él sólo creo hombre y mujer, que quiere bendecirlos, y que quiere que nos multipliquemos; el no atender a esto, no sólo afectará a las personas que deciden desobedecer, pues no sólo ellos se perderán la bendición, pero terminarán por afectar a otros, y con el tiempo llevarán al ser humano a la extinción.
Oh, que Dios nos permita vivir de tal manera que estemos tomando en cuenta el plan de Dios para el hombre.
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