Nuestro compromiso y responsabilidad con la Palabra de Dios
Josué 1:7,8
Por Víctor Hugo Guel González
La semana pasada, escribimos acerca del compromiso y responsabilidad que Dios quiere que tengamos para el propósito que Él tiene para nuestras vidas.
En esta ocasión, deseo hablar del compromiso y responsabilidad que el Señor desea que tengamos para con su Palabra. En Josué 1:7,8, de manera muy concreta, nos expresa cómo esto se lleva acabo. En primer lugar, en el versículo 7 dice: “Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni adiestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas.” Sin lugar a dudas, para hacer conforme a toda su Palabra, necesitamos conocer lo que la Biblia dice y enseña; pero desde allí comienza nuestra falta de compromiso y nuestra responsabilidad, ya que hay gente que ni siquiera se ha preocupado por tener un ejemplar de la Palabra de Dios; y otros aunque la tienen, ni toman tiempo para leerla. Por cierto, la Biblia no es para tenerla de adorno, no es para que sea como un amuleto que nos trae “buena suerte”, de ninguna manera. La Biblia es para que la leamos, la conozcamos, la meditemos; hay gente, aun cristianos, que saben muchas cosas, saben de política, de deportes, de religión, de tradiciones, de cultura general, y poco o nada conocen de la Palabra de Dios, por lo cual, yo le animo a que consiga una Biblia, y de tenerla, le exhorto a que la lea para que pueda conocerla.
Siguiendo con el mensaje, en el versículo 8 dice: “Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él…” Ahora, la palabra meditar, quiere decir: atesorar, es decir, la Escritura debe ser algo que tengamos en alta estima, como algo muy valioso, de un valor incalculable. Es bien lamentable cuando hay quienes ya hemos leído la Palabra de Dios, la conocemos, pero aun así, no le damos importancia, es más, a la hora de tomar decisiones, ni nos acordamos de ella, no la tomamos en cuenta; en ocasiones de manera deliberada, la ignoramos y hacemos nuestra voluntad. Por ejemplo, en Hebreos 10:25 dice: “No dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre…” y cuánta gente ni a la iglesia va, o van tan solo el 31 de diciembre o en Navidad, y el resto del año ni se paran a la iglesia. Y claro que debe haber compromiso y responsabilidad en conocerla, en meditarla.
Finalmente, Josué versículo 8 también dice: “…Para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito.” “Guardar y hacer” es decir, poner por obra, en práctica lo que la Biblia dice, y en esa manera cumplir nuestra responsabilidad siendo valientes y esforzados en hacer nuestra parte, de esa forma, es que Dios nos va a bendecir, Dios nos va a prosperar, y todo lo que hagamos nos saldrá bien.
Yo le ánimo, le exhorto, a que cumplamos nuestro compromiso y nuestra responsabilidad con la Palabra de Dios, y tener así su bendición.
Iglesia Bíblica Bautista
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