VIDA Y NO MUERTE
DIOS EL PADRE CELESTIAL, en Efesios 2:1-2 de la Biblia se dirige a los creyentes conversos y salvos en Cristo de todos los tiempos para recordarles que precisamente Cristo Jesús: “Os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados”.
Asimismo, Dios recuerda a sus creyentes que tal conducta pecaminosa la practicaban al estar dando seguimiento a las corrientes de maldad imperantes de este mundo, propias del diablo, como príncipe maligno y espíritu perverso de la potestad del aire, que opera en las personas que de tal manera son desobedientes ante Dios.
En efecto, sólo Cristo salva y concede la Vida Eterna, Feliz y Gozosa en el Cielo, a sus seguidores, que lo aceptan como único salvador personal, porque quien cree en Dios Cristo Jesús “tiene Vida Eterna; pero el que rehúsa creer en El, no verá la Vida, sino que la ira de Dios está sobre él”, según Juan 3:36.
Por lo tanto, como la Palabra de Dios permanece para siempre, según 1 Pedro 1:25, Dios pone aquí ahora este obsequio maravilloso a disposición de toda persona que aún no haya recibido a Cristo como Salvador, para que obtenga de inmediato y para siempre la Vida Feliz y Gozosa en el Cielo de Dios, en lugar del castigo eterno en el infierno, según Juan 3:16.
Por ende, nada ni nadie podrá impedirnos entrar en la Unica Vida Eterna llena de felicidad que nos transmite Cristo cuando lo recibimos como Perfecto Salvador Personal porque: “Dios que es rico en misericordia, por su gran amor con el que nos ama, aun estando muertos en pecados quiere darnos vida juntamente con Cristo”, según Efesios 2:4-6.
Estimado Lector: eres muy distinguido y apreciado por Cristo quien te invita para que dejes atrás la muerte espiritual y entres en la Vida Feliz que Cristo te proporciona para Vivir Eternamente a su lado con todo Gozo y Satisfacción ya que de esta manera, harás tuyo el Regalo de su Salvación, diciéndole lo siguiente: “Mi Señor Dios Cristo, ¡SALVAME!, me arrepiento ante Ti de mis pecados, perdóname, y límpiame con tu Sangre Divina derramada en la cruz del Calvario, creo en Ti y te recibo como Unico, Suficiente y Perfecto Salvador Personal”.
Muchas gracias, que Dios los bendiga ricamente y si El permite continuaremos el viernes siguiente. A sus órdenes mi teléfono el 815-39-73.
