/ viernes 13 de noviembre de 2020

Entorno Empresarial

Buena Noticia con sus reservas a futuro

La agencia Fitch Ratings ratificó la calificación de largo plazo en moneda extranjera de México en BBB-, con perspectiva estable.

Lo anterior es una buena noticia que premia el manejo de las finanzas del gobierno.

Si no se hubiera mantenido el grado de inversión estaríamos hablando de una depreciación del peso, aumento de las tasas de interés, incertidumbre para los inversionistas extranjeros, entre otras, sin embargo hay algunas acotaciones a futuro que deberán resolverse.

Por decirlo coloquialmente ya echamos mano de los ahorritos para salir adelante ante el embate de la pandemia a nivel mundial, y estos han sido un presupuesto raquítico que quita recursos de tecnología y programas que ya eran de por sí prioritarios, fideicomisos, recorte de subsecretarías, etc. Ya lo estamos viendo con las inundaciones en Tabasco. Aunado a una política fiscal restrictiva.

Sin embargo para crecer hay motores importantes que han usado distintos gobiernos en México tal es el caso de mega obras como lo han sido carreteras en diferentes estados del país, actualmente el presupuesto orienta este gasto al tren maya que por ser muy focalizado no tendrá el impacto que debería con el gasto público, será más bien capricho de campaña que costará más que la vacuna, otro motor que ha sido aún de mayor impacto es la inversión privada, con su deseado empleo e infraestructura.

Parece no haber aliciente para invertir en México, la concepción ideológica de nacionalismo en lugar de pragmatismo hace tomar decisiones como las de las energías limpias acordes con el resto del mundo, y que se descartan para hacer de las empresas paraestatales monopólicas ineficientes, que por cierto estas decisiones van en contra del TMEC, y en su momento se nos pedirá cumplir con el acuerdo.

Con las noticias actuales de un nuevo embate por el rebrote mundial por COVID y la parálisis que generaría en el mundo como lo vemos en Gran Bretaña, Francia, etc., y sin un programa de apoyo a las empresas muchas más no lograrían sobrellevar la situación y el gobierno no podrá detonar su gasto público por que ya no habrá de donde y entre menos empresas y bajo empleo habrá una baja sustancial en la recaudación, o sea en una de las entradas de dinero del gobierno.

En este orden de ideas el panorama a futuro será incierto y ojalá el grado de inversión se mantenga para tener margen de maniobra.

Buena Noticia con sus reservas a futuro

La agencia Fitch Ratings ratificó la calificación de largo plazo en moneda extranjera de México en BBB-, con perspectiva estable.

Lo anterior es una buena noticia que premia el manejo de las finanzas del gobierno.

Si no se hubiera mantenido el grado de inversión estaríamos hablando de una depreciación del peso, aumento de las tasas de interés, incertidumbre para los inversionistas extranjeros, entre otras, sin embargo hay algunas acotaciones a futuro que deberán resolverse.

Por decirlo coloquialmente ya echamos mano de los ahorritos para salir adelante ante el embate de la pandemia a nivel mundial, y estos han sido un presupuesto raquítico que quita recursos de tecnología y programas que ya eran de por sí prioritarios, fideicomisos, recorte de subsecretarías, etc. Ya lo estamos viendo con las inundaciones en Tabasco. Aunado a una política fiscal restrictiva.

Sin embargo para crecer hay motores importantes que han usado distintos gobiernos en México tal es el caso de mega obras como lo han sido carreteras en diferentes estados del país, actualmente el presupuesto orienta este gasto al tren maya que por ser muy focalizado no tendrá el impacto que debería con el gasto público, será más bien capricho de campaña que costará más que la vacuna, otro motor que ha sido aún de mayor impacto es la inversión privada, con su deseado empleo e infraestructura.

Parece no haber aliciente para invertir en México, la concepción ideológica de nacionalismo en lugar de pragmatismo hace tomar decisiones como las de las energías limpias acordes con el resto del mundo, y que se descartan para hacer de las empresas paraestatales monopólicas ineficientes, que por cierto estas decisiones van en contra del TMEC, y en su momento se nos pedirá cumplir con el acuerdo.

Con las noticias actuales de un nuevo embate por el rebrote mundial por COVID y la parálisis que generaría en el mundo como lo vemos en Gran Bretaña, Francia, etc., y sin un programa de apoyo a las empresas muchas más no lograrían sobrellevar la situación y el gobierno no podrá detonar su gasto público por que ya no habrá de donde y entre menos empresas y bajo empleo habrá una baja sustancial en la recaudación, o sea en una de las entradas de dinero del gobierno.

En este orden de ideas el panorama a futuro será incierto y ojalá el grado de inversión se mantenga para tener margen de maniobra.