/ viernes 29 de junio de 2018

Entorno Empresarial

TRANSFORMACIONES DEL COMERCIO MUNDIAL

He mencionado varias veces en otras columnas que el comercio puede mejorar el bienestar de todo el mundo.

Pero no es solo acceso a nuevos productos lo que trae el comercio, ya que es una fuerza transformadora de los países.

No es solo la transferencia de bienes el único efecto del comercio, éste ha venido acompañado de transferencia de conocimiento que ha tenido un impacto significativo sobre todos.

En este momento existen tres grandes fuerzas en términos de comercio internacional en el mundo, Estados Unidos, China y Europa, cada una con su dinámica específica y características particulares.

En Europa se está reescribiendo la relación comercial de la Unión Europea e Inglaterra donde todavía se está trazando el nuevo mapa comercial después del Brexit.

Estados Unidos también está redefiniendo sus relaciones comerciales, aumentando tarifas en importaciones no solo de China, sino de aliados como Canadá, México y la misma Unión Europea.

Pero China, antes de cerrarse está buscando abrirse cada vez más al mundo con proyectos como revivir la ruta de la seda para crear flujos comerciales en Asia y Europa, y el plan “Hecho en China 2025” que busca ubicar al país como una fuerza dominante en el sector de alta tecnología.

Vale la pena que, aunque ésta es su política general ya ha respondido con aumentos de tarifas de importaciones estadounidenses frente a las últimas medidas de la Casa Blanca lo que podría desencadenar otra respuesta por parte de Estados Unidos y llevar finalmente a una guerra comercial.

Es claro que Estados Unidos busca compensar vía aumento de precios la mayor productividad o el menor esquema de costos de productos no solo chinos, sino de otros países que tiene una ventaja comparativa frente a sus productos locales.

De igual manera en Europa, las fuerzas de negociación con Inglaterra todavía están por definir cómo se afectarán los aranceles, pero esto también afectará al final los precios de los bienes a ambos lados del canal de la mancha.

Es fácil darnos cuenta que el flujo del comercio no solo depende de qué país esté mejor equipado para producir y comercializar bienes, sino también de aquel que sea más hábil negociando los acuerdos o que tenga el mayor mecanismo de presión vía precios, por lo que las tres fuerzas mencionadas antes tendrán un impacto clave en los flujos de comercio mundial.


TRANSFORMACIONES DEL COMERCIO MUNDIAL

He mencionado varias veces en otras columnas que el comercio puede mejorar el bienestar de todo el mundo.

Pero no es solo acceso a nuevos productos lo que trae el comercio, ya que es una fuerza transformadora de los países.

No es solo la transferencia de bienes el único efecto del comercio, éste ha venido acompañado de transferencia de conocimiento que ha tenido un impacto significativo sobre todos.

En este momento existen tres grandes fuerzas en términos de comercio internacional en el mundo, Estados Unidos, China y Europa, cada una con su dinámica específica y características particulares.

En Europa se está reescribiendo la relación comercial de la Unión Europea e Inglaterra donde todavía se está trazando el nuevo mapa comercial después del Brexit.

Estados Unidos también está redefiniendo sus relaciones comerciales, aumentando tarifas en importaciones no solo de China, sino de aliados como Canadá, México y la misma Unión Europea.

Pero China, antes de cerrarse está buscando abrirse cada vez más al mundo con proyectos como revivir la ruta de la seda para crear flujos comerciales en Asia y Europa, y el plan “Hecho en China 2025” que busca ubicar al país como una fuerza dominante en el sector de alta tecnología.

Vale la pena que, aunque ésta es su política general ya ha respondido con aumentos de tarifas de importaciones estadounidenses frente a las últimas medidas de la Casa Blanca lo que podría desencadenar otra respuesta por parte de Estados Unidos y llevar finalmente a una guerra comercial.

Es claro que Estados Unidos busca compensar vía aumento de precios la mayor productividad o el menor esquema de costos de productos no solo chinos, sino de otros países que tiene una ventaja comparativa frente a sus productos locales.

De igual manera en Europa, las fuerzas de negociación con Inglaterra todavía están por definir cómo se afectarán los aranceles, pero esto también afectará al final los precios de los bienes a ambos lados del canal de la mancha.

Es fácil darnos cuenta que el flujo del comercio no solo depende de qué país esté mejor equipado para producir y comercializar bienes, sino también de aquel que sea más hábil negociando los acuerdos o que tenga el mayor mecanismo de presión vía precios, por lo que las tres fuerzas mencionadas antes tendrán un impacto clave en los flujos de comercio mundial.