/ domingo 9 de junio de 2024

Sin cruda electoral

Luego de la jornada electoral del 2 de junio, y tras la entrega de constancias de mayoría por parte de los organismos electorales, en San Luis Potosí no hay “cruda electoral” al menos no para el Partido Verde Ecologista de México (Pvem); si bien es cierto que no se llevó el carro completo, al no conquistar las alcaldías de la capital y Matehuala, en general el escenario político que resultó de la expresión volcada en las urnas es uno de los más favorecedores para el gallardismo de cara a la carrera del 2027 que para muchos está a la vuelta de la esquina.

La regla en escenarios políticos indica que los tres primeros años de gobierno son una luna de miel para el Gobernante y su círculo cercano, en cambio los tres restantes ya viene en descenso y con el desgaste natural que da el ejercicio del poder. Sin embargo, acostumbrado siempre a romper todas las reglas, el Gobernador Ricardo Gallardo Cardona parece no estar ni cerca de esa regla. Los números en las urnas lo dicen y además son fríos, los veran quienes lo quieran ver.

Fortalecido en más de una zona del Estado, el Gobernador Ricardo Gallardo y el PVEM fueron grandes ganadores de esta elección. Basta ver la votación obtenida en favor de la ahora presidenta electa, Claudia Sheimbaum que aportó el gran trabajo que se hizo palmo a palmo en cada zona de San Luis Potosí, con un tino y buena labor política que le da mantenerse como lider moral del Verde, Gallardo colocó a sus alfiles en los sitios justos para demostrar que el gallardismo va hacia arriba en nuestra entidad.

Un ejemplo justo de reconocer es el que se hizo bajo la acertada dirección del secretario General de Gobierno J, Guadalupe Torres Sánchez, en el altiplano potosino donde la encomienda del jefe político Gallardo se cumplió con excelentes resultados para el distrito 2, donde ciertamente hubo elecciones no ganadas como Salinas y Mexquitic, pero que son expresión natural de la diversidad política que prevalece y que debe seguir en bien del fortalecimiento de la democracia.

En cambio hubo otros municipios en los que Guadalupe Torres, con un trabajo constante y puntual logró dar buenas cuentas al mandatario potosino, y por ello no resultó extraño el contundente triunfo electoral de su candidata a la diputación local por el Distrito 2, Dulce Sánchez quien obtuvo 61 mil 153 votos, que le permitieron superar no nada más a los otros candidatos sino colocarse como la diputada más votada de todo el Estado. No es una cosa menor y es resultado del buen oficio del Secretario de Gobierno.

Otro caso de este distrito son las reelecciones de presidentes como Marisol Nájera en Charcas; Erick Giovanni Espino, en Villa de Ramos o Chava López en Villa de Arriaga y desde luego también el triunfo para recuperar otros municipios como Santo Domingo con Fili Rodríguez quien arrebató el Ayuntamiento a la coalición PRI, PAN, PRD y CP además de la alcaldía de Cedral que ganó Cinthia Segovia, con más de 4 mil 700 votos superando los votos de la elección del 2021 cuando el alcalde actual obtuvo apenas 2 mil 855.

En fin, sin duda, los analistas políticos seguirán ya encarrerados escuchando el canto de las sirenas de quienes buscan magnificar pequeñas victorias para generar falsas expectativas, pero los números arrojados por la elección son los que nos dan la certeza que en el altiplano hubo un excelente trabajo de coordinación encabezado por Guadalupe Torres que lo coloca como una figura no solo cercana al Gobernador sino que le da los resultados que el mandatario espera y también reconoce.

CASO RICH

Mientras el alcalde reelecto Enrique Galindo Ceballos, se encontraba de plácemes, festejando su triunfo electoral en un salón de la zona dorada de la capital potosina junto al Director de Protección Civil municipal Daniel Hernández Rojas, a esa misma hora, durante la madrugada del sábado, dos jóvenes perdían la vida tras caer de un tercer piso del antro Rich, donde se llevaba a cabo un evento al que concurría una gran cantidad de personas.

En la tragedia se puso nuevamente en evidencia el laxo si no es que nulo trabajo de parte del ayuntamiento de la capital, a través de sus áreas de comercio y protección civil para garantizar las condiciones de seguridad que este tipo de establecimientos deben cumplir para poder operar, pero no, como suele suceder en estos casos, la permisividad de la autoridad capitalina para hacerse de la vista gorda a cambio de algún incentivo o favor, demuestra una vez más el nivel de corrupción que impera en la administración que gobernará otros tres años a las y los potosinos.

Durante el agasajo que Galindo y sus compinches llevaban a cabo, había varios funcionarios municipales incluido el propio titular de protección civil quien en lugar de asegurarse de cumplir con su tarea que es la de supervisar que este tipo de lugares cumplan con las medidas de seguridad requeridas, prefirió estar cerca de su patrón y junto a la cúpula priista que por cierto, respira una vez más para poder aferrarse al presupuesto de un gruesa nómina municipal por otros tres años.

Con el antecedente de que el Rich no cuenta con los permisos municipales para operar, la pregunta es: ¿Dónde están los inspectores del ayuntamiento para hacer su trabajo?

Parece que la respuesta es obvia, sin embargo y ahora que se registra la pérdida de dos vidas humanas, es claro que el gobierno de la capital, buscará como chivo expiatorio, al dueño o los dueños del antro en mención para librarse de su responsabilidad por esta terrible omisión y tal vez para evitar hasta donde se pueda, evidenciar el grado de corrupción que caracteriza al PRIAN, mediante los moches que seguramente se reciben para permitir que estos sitios operen sin ninguna restricción.

Ahora son al menos un par de familias a los que la tragedia los envuelve, pues nunca se imaginaron que un lugar de diversión para éstos jóvenes se convertiría en una bomba de tiempo gracias a la colaboración del gobierno de Enrique Galindo, que ahora, tendrá que responder o emitir un posicionamiento respecto a la indemnización a los familiares o deslinde de responsabilidades que se deberá tener para que las cosas queden lo más claras posibles y se castigue a los responsables.

Resulta lamentable que tengan que ocurrir estos accidentes para entonces actuar como autoridad y en el caso del ayuntamiento capitalino, aún es más criticable su pésima operatividad para controlar estos antros que sin duda no están diseñados para albergar a una gran cantidad de personas y ya ni se diga la acostumbrada omisión para permitir la entrada de menores de edad y para dejarlos que ingieran bebidas embriagantes, todo con la complacencia del “gobierno del sí”, el que sí se corrompe, el que sí engaña, el que sí manipula, el que sí miente a las y los potosinos.

Galindo festeja con una mancha negra o roja según se vea su pomposo triunfo electoral, pero no debe olvidar que este penoso incidente, se suma a la gran cantidad de pendientes que su gobierno tiene que resolver, como la falta de agua, la inseguridad y también la corrupción que sus directores, sus inspectores, y una gran cantidad de operadores, permiten cada vez que tienen oportunidad a cambio de moches, sin importar si se pone en riesgo la integridad o la vida de las personas.

Que este nuevo y oscuro episodio dentro de la administración capitalina, sirva de escarmiento para que Galindo ahora sí ponga orden después de tres infructuosos tres años de no hacerlo, aunque parece ser complicado que lo logre pues los vicios y los malos manejos son la característica del PRIAN.

X @lozano_ray

Luego de la jornada electoral del 2 de junio, y tras la entrega de constancias de mayoría por parte de los organismos electorales, en San Luis Potosí no hay “cruda electoral” al menos no para el Partido Verde Ecologista de México (Pvem); si bien es cierto que no se llevó el carro completo, al no conquistar las alcaldías de la capital y Matehuala, en general el escenario político que resultó de la expresión volcada en las urnas es uno de los más favorecedores para el gallardismo de cara a la carrera del 2027 que para muchos está a la vuelta de la esquina.

La regla en escenarios políticos indica que los tres primeros años de gobierno son una luna de miel para el Gobernante y su círculo cercano, en cambio los tres restantes ya viene en descenso y con el desgaste natural que da el ejercicio del poder. Sin embargo, acostumbrado siempre a romper todas las reglas, el Gobernador Ricardo Gallardo Cardona parece no estar ni cerca de esa regla. Los números en las urnas lo dicen y además son fríos, los veran quienes lo quieran ver.

Fortalecido en más de una zona del Estado, el Gobernador Ricardo Gallardo y el PVEM fueron grandes ganadores de esta elección. Basta ver la votación obtenida en favor de la ahora presidenta electa, Claudia Sheimbaum que aportó el gran trabajo que se hizo palmo a palmo en cada zona de San Luis Potosí, con un tino y buena labor política que le da mantenerse como lider moral del Verde, Gallardo colocó a sus alfiles en los sitios justos para demostrar que el gallardismo va hacia arriba en nuestra entidad.

Un ejemplo justo de reconocer es el que se hizo bajo la acertada dirección del secretario General de Gobierno J, Guadalupe Torres Sánchez, en el altiplano potosino donde la encomienda del jefe político Gallardo se cumplió con excelentes resultados para el distrito 2, donde ciertamente hubo elecciones no ganadas como Salinas y Mexquitic, pero que son expresión natural de la diversidad política que prevalece y que debe seguir en bien del fortalecimiento de la democracia.

En cambio hubo otros municipios en los que Guadalupe Torres, con un trabajo constante y puntual logró dar buenas cuentas al mandatario potosino, y por ello no resultó extraño el contundente triunfo electoral de su candidata a la diputación local por el Distrito 2, Dulce Sánchez quien obtuvo 61 mil 153 votos, que le permitieron superar no nada más a los otros candidatos sino colocarse como la diputada más votada de todo el Estado. No es una cosa menor y es resultado del buen oficio del Secretario de Gobierno.

Otro caso de este distrito son las reelecciones de presidentes como Marisol Nájera en Charcas; Erick Giovanni Espino, en Villa de Ramos o Chava López en Villa de Arriaga y desde luego también el triunfo para recuperar otros municipios como Santo Domingo con Fili Rodríguez quien arrebató el Ayuntamiento a la coalición PRI, PAN, PRD y CP además de la alcaldía de Cedral que ganó Cinthia Segovia, con más de 4 mil 700 votos superando los votos de la elección del 2021 cuando el alcalde actual obtuvo apenas 2 mil 855.

En fin, sin duda, los analistas políticos seguirán ya encarrerados escuchando el canto de las sirenas de quienes buscan magnificar pequeñas victorias para generar falsas expectativas, pero los números arrojados por la elección son los que nos dan la certeza que en el altiplano hubo un excelente trabajo de coordinación encabezado por Guadalupe Torres que lo coloca como una figura no solo cercana al Gobernador sino que le da los resultados que el mandatario espera y también reconoce.

CASO RICH

Mientras el alcalde reelecto Enrique Galindo Ceballos, se encontraba de plácemes, festejando su triunfo electoral en un salón de la zona dorada de la capital potosina junto al Director de Protección Civil municipal Daniel Hernández Rojas, a esa misma hora, durante la madrugada del sábado, dos jóvenes perdían la vida tras caer de un tercer piso del antro Rich, donde se llevaba a cabo un evento al que concurría una gran cantidad de personas.

En la tragedia se puso nuevamente en evidencia el laxo si no es que nulo trabajo de parte del ayuntamiento de la capital, a través de sus áreas de comercio y protección civil para garantizar las condiciones de seguridad que este tipo de establecimientos deben cumplir para poder operar, pero no, como suele suceder en estos casos, la permisividad de la autoridad capitalina para hacerse de la vista gorda a cambio de algún incentivo o favor, demuestra una vez más el nivel de corrupción que impera en la administración que gobernará otros tres años a las y los potosinos.

Durante el agasajo que Galindo y sus compinches llevaban a cabo, había varios funcionarios municipales incluido el propio titular de protección civil quien en lugar de asegurarse de cumplir con su tarea que es la de supervisar que este tipo de lugares cumplan con las medidas de seguridad requeridas, prefirió estar cerca de su patrón y junto a la cúpula priista que por cierto, respira una vez más para poder aferrarse al presupuesto de un gruesa nómina municipal por otros tres años.

Con el antecedente de que el Rich no cuenta con los permisos municipales para operar, la pregunta es: ¿Dónde están los inspectores del ayuntamiento para hacer su trabajo?

Parece que la respuesta es obvia, sin embargo y ahora que se registra la pérdida de dos vidas humanas, es claro que el gobierno de la capital, buscará como chivo expiatorio, al dueño o los dueños del antro en mención para librarse de su responsabilidad por esta terrible omisión y tal vez para evitar hasta donde se pueda, evidenciar el grado de corrupción que caracteriza al PRIAN, mediante los moches que seguramente se reciben para permitir que estos sitios operen sin ninguna restricción.

Ahora son al menos un par de familias a los que la tragedia los envuelve, pues nunca se imaginaron que un lugar de diversión para éstos jóvenes se convertiría en una bomba de tiempo gracias a la colaboración del gobierno de Enrique Galindo, que ahora, tendrá que responder o emitir un posicionamiento respecto a la indemnización a los familiares o deslinde de responsabilidades que se deberá tener para que las cosas queden lo más claras posibles y se castigue a los responsables.

Resulta lamentable que tengan que ocurrir estos accidentes para entonces actuar como autoridad y en el caso del ayuntamiento capitalino, aún es más criticable su pésima operatividad para controlar estos antros que sin duda no están diseñados para albergar a una gran cantidad de personas y ya ni se diga la acostumbrada omisión para permitir la entrada de menores de edad y para dejarlos que ingieran bebidas embriagantes, todo con la complacencia del “gobierno del sí”, el que sí se corrompe, el que sí engaña, el que sí manipula, el que sí miente a las y los potosinos.

Galindo festeja con una mancha negra o roja según se vea su pomposo triunfo electoral, pero no debe olvidar que este penoso incidente, se suma a la gran cantidad de pendientes que su gobierno tiene que resolver, como la falta de agua, la inseguridad y también la corrupción que sus directores, sus inspectores, y una gran cantidad de operadores, permiten cada vez que tienen oportunidad a cambio de moches, sin importar si se pone en riesgo la integridad o la vida de las personas.

Que este nuevo y oscuro episodio dentro de la administración capitalina, sirva de escarmiento para que Galindo ahora sí ponga orden después de tres infructuosos tres años de no hacerlo, aunque parece ser complicado que lo logre pues los vicios y los malos manejos son la característica del PRIAN.

X @lozano_ray