/ domingo 18 de febrero de 2024

Opinión / La inclinación de la balanza

Con el triunfo inobjetable de Sonia Mendoza en el proceso interno del Partido Verde para la candidatura a la Presidencia Municipal de la capital, saltan diversas cuestiones que son importantes de cara a lo que se vendrá ya en la contienda formal antes de la decisión ciudadana para el próximo 2 de junio, pues la manera en la que llegan los perfiles, será tal vez el punto más importante para poder pronosticar hacia donde se inclinará la balanza.

Se había señalado con antelación que sería muy importante la reacción y el comportamiento que tuviese el derrotado en el proceso interno donde la madurez política y anteponer el objetivo principal del partido que es ganar la elección por encima del interés personal, daría cuenta de la fortaleza que guarda el Verde para enfrentar la contienda abierta, y ahí, Gilberto Hernández Villafuerte demostró que se suma a Sonia Mendoza para ayudar a su partido.

¿Por qué es importante todo esto?

La respuesta es precisamente lo que se señalaba al principio de este espacio, es decir, ver el momento de cada uno de los perfiles, y para Sonia Mendoza, es arrancar tal vez en un contexto inmejorable, porque estará fortalecida por la estructura de su propio partido, por el líder moral Ricardo Gallardo y además por diversos sectores que le han manifestado su apoyo para encabezar un proyecto de cambio que realmente le urge a la capital potosina, donde incluso los mismos, simpatizantes y militantes panistas o priistas, ya expresan su respaldo a la ahora candidata a la alcaldía, ya que no solo, no ven un escenario optimista de triunfo en la figura de Enrique Galindo, sino que hay demasiada inconformidad por el manchado diseño para elegir al candidato de la coalición PRI-PAN-PRD.

Con este contexto, no hay duda de que Sonia Mendoza se yergue como una candidata que incluso se planta como la rival a vencer, toda vez que Galindo no ha logrado despegar como alcalde y deja a su paso, muchas dudas respecto a sus posibilidades de triunfo, tomando en cuenta que aún, no ha dejado el cargo para concentrarse de lleno en su campaña a pesar de los llamados que se le han hecho para que en un acto de congruencia deje de aprovecharse de su función para hacer proselitismo desde esa trinchera.

El acaparamiento político de Galindo sobre otros perfiles que por derecho también debieron tener piso parejo para contender internamente por la candidatura, lo deja también mal parado, pues en su idea, es ser o ser a costa de lo que sea alcalde de la capital, o ya en su defecto, no dejar ninguna posibilidad de quedar fuera del erario público pues en la fórmula al Senado, su esposa Estela Arriaga Márquez, es suplente de Verónica Rodríguez.

El alcalde viajero como le llaman, va a tener mucha presión, dado que la gente no está contenta con su gestión, y a eso, también se le suma el descrédito de algunos perfiles que lo apoyan como Octavio Pedroza y Victoria Labastida, además de muchos otros nombres con un oscuro pasado que buscan no desligarse de la posibilidad de seguir obteniendo beneficios para seguir hundiendo a San Luis Potosí, como lo han hecho durante décadas.

Si bien Enrique Galindo, contará con una estructura partidista como la del PRI –debilitada, pero al fin estructura-, su candidatura tendrá un reto doblemente complicado a diferencia de lo ocurrido hace tres años cuando ganó precisamente la alcaldía, ya que ahora, su coco será convencer a los ciudadanos de que ahora sí, va a resolver el tema del agua y la inseguridad, algo que en la realidad se antoja difícil, pues la mayoría de la gente, no está contenta con su pobre desempeño.

Sonia Mendoza, quien por cierto ya fue en alguna ocasión candidata al Gobierno del Estado y que estuvo a nada de haber ganado esa elección que en realidad sí ganó, obtuvo números interesantes en la votación sumada en la capital, y aunque ahora abandera otro partido, el capital político y el arrastre que tiene, los ha mantenido hasta el momento, por lo que luce prácticamente con muchas posibilidades de darle al Verde un triunfo electoral histórico que puede significar el despegue absoluto del municipio para los siguientes años, pues contaría con el respaldo absoluto de un gobernador de su propio partido y de la afinidad política y de género que mantiene con Claudia Sheinbaum, no en vano parte de su discurso es “ya es tiempo de las mujeres”.

Ahora para Sonia Mendoza, le resta en estos próximos días, preparar junto a su partido, lo relativo al registro formal de su candidatura ante la autoridad electoral competente, un momento que se presta para mostrar músculo respecto a lo que va a ser su campaña, donde seguramente serán miles de simpatizantes y militantes, los que estarán acompañando su propuesta, lo que puede ser un referente de lo que veremos ya en el desarrollo de las campañas.

X @lozano_ray

Con el triunfo inobjetable de Sonia Mendoza en el proceso interno del Partido Verde para la candidatura a la Presidencia Municipal de la capital, saltan diversas cuestiones que son importantes de cara a lo que se vendrá ya en la contienda formal antes de la decisión ciudadana para el próximo 2 de junio, pues la manera en la que llegan los perfiles, será tal vez el punto más importante para poder pronosticar hacia donde se inclinará la balanza.

Se había señalado con antelación que sería muy importante la reacción y el comportamiento que tuviese el derrotado en el proceso interno donde la madurez política y anteponer el objetivo principal del partido que es ganar la elección por encima del interés personal, daría cuenta de la fortaleza que guarda el Verde para enfrentar la contienda abierta, y ahí, Gilberto Hernández Villafuerte demostró que se suma a Sonia Mendoza para ayudar a su partido.

¿Por qué es importante todo esto?

La respuesta es precisamente lo que se señalaba al principio de este espacio, es decir, ver el momento de cada uno de los perfiles, y para Sonia Mendoza, es arrancar tal vez en un contexto inmejorable, porque estará fortalecida por la estructura de su propio partido, por el líder moral Ricardo Gallardo y además por diversos sectores que le han manifestado su apoyo para encabezar un proyecto de cambio que realmente le urge a la capital potosina, donde incluso los mismos, simpatizantes y militantes panistas o priistas, ya expresan su respaldo a la ahora candidata a la alcaldía, ya que no solo, no ven un escenario optimista de triunfo en la figura de Enrique Galindo, sino que hay demasiada inconformidad por el manchado diseño para elegir al candidato de la coalición PRI-PAN-PRD.

Con este contexto, no hay duda de que Sonia Mendoza se yergue como una candidata que incluso se planta como la rival a vencer, toda vez que Galindo no ha logrado despegar como alcalde y deja a su paso, muchas dudas respecto a sus posibilidades de triunfo, tomando en cuenta que aún, no ha dejado el cargo para concentrarse de lleno en su campaña a pesar de los llamados que se le han hecho para que en un acto de congruencia deje de aprovecharse de su función para hacer proselitismo desde esa trinchera.

El acaparamiento político de Galindo sobre otros perfiles que por derecho también debieron tener piso parejo para contender internamente por la candidatura, lo deja también mal parado, pues en su idea, es ser o ser a costa de lo que sea alcalde de la capital, o ya en su defecto, no dejar ninguna posibilidad de quedar fuera del erario público pues en la fórmula al Senado, su esposa Estela Arriaga Márquez, es suplente de Verónica Rodríguez.

El alcalde viajero como le llaman, va a tener mucha presión, dado que la gente no está contenta con su gestión, y a eso, también se le suma el descrédito de algunos perfiles que lo apoyan como Octavio Pedroza y Victoria Labastida, además de muchos otros nombres con un oscuro pasado que buscan no desligarse de la posibilidad de seguir obteniendo beneficios para seguir hundiendo a San Luis Potosí, como lo han hecho durante décadas.

Si bien Enrique Galindo, contará con una estructura partidista como la del PRI –debilitada, pero al fin estructura-, su candidatura tendrá un reto doblemente complicado a diferencia de lo ocurrido hace tres años cuando ganó precisamente la alcaldía, ya que ahora, su coco será convencer a los ciudadanos de que ahora sí, va a resolver el tema del agua y la inseguridad, algo que en la realidad se antoja difícil, pues la mayoría de la gente, no está contenta con su pobre desempeño.

Sonia Mendoza, quien por cierto ya fue en alguna ocasión candidata al Gobierno del Estado y que estuvo a nada de haber ganado esa elección que en realidad sí ganó, obtuvo números interesantes en la votación sumada en la capital, y aunque ahora abandera otro partido, el capital político y el arrastre que tiene, los ha mantenido hasta el momento, por lo que luce prácticamente con muchas posibilidades de darle al Verde un triunfo electoral histórico que puede significar el despegue absoluto del municipio para los siguientes años, pues contaría con el respaldo absoluto de un gobernador de su propio partido y de la afinidad política y de género que mantiene con Claudia Sheinbaum, no en vano parte de su discurso es “ya es tiempo de las mujeres”.

Ahora para Sonia Mendoza, le resta en estos próximos días, preparar junto a su partido, lo relativo al registro formal de su candidatura ante la autoridad electoral competente, un momento que se presta para mostrar músculo respecto a lo que va a ser su campaña, donde seguramente serán miles de simpatizantes y militantes, los que estarán acompañando su propuesta, lo que puede ser un referente de lo que veremos ya en el desarrollo de las campañas.

X @lozano_ray