/ miércoles 8 de julio de 2020

Eureka

La mejor decisión ante el Covid-19

No hay marcha atrás en este mundo, la globalización es irreversible. Sin embargo, aún cuando los efectos son similares, cada nación ha tomado las propias decisiones ante la pandemia del Covid-19; en contexto sociales, económicos y democráticos, completamente distintos. Estamos en momentos muy difíciles para todos.

Ninguno quedamos exentos de las consecuencias negativas del hoy, la globalización y las tecnologías tienen sus bondades. El Covid-19 empezó en China, se extendió por todo el mundo y cada día escuchamos informaciones nuevas sobre la situación de la enfermedad, además del trágico dolor de las muertes.

El tema de los medicamentos nos ocupa como la duda de cuándo estarán las vacunas. Son visibles las contradicciones de los países, también de los grupos de comunidades científicas. Comprendemos que son imposibles las certezas en este momento, pero hay decisiones “esquizofrénicas” que se han tomado.

En diciembre del 2019, cuando apareció esta enfermedad recordé todas las pandemias que se han presentado en China y en otros países; en su momento pregunté si iba a llegar a México y las primeras afirmaciones de los expertos eran que no. Como periodista me enseñaron a dudar, a preguntar, a cuestionar, y yo sabía que nos iba a llegar.

Entonces me preparé en lo que pude con insumos, claro que la gente más cercana me comentaba que era una exagerada. El tiempo comprobó la veracidad de mis afirmaciones, he conocido la situación de la enfermedad gracias a Internet y a los contactos que tengo en países representativos, de todas las zonas de este planeta. He escrito correos electrónicos a los gobiernos, de diferentes ideologías, muchos me han contestado; he preguntado sobre lo que se ha hecho bien y lo que se ha hecho mal. He visto todas las conferencias de México, de San Luis Potosí y de algunos otros estados.

Tengo coincidencias y divergencias, hay una necesidad de salir para trabajar y la mayoría de la población no se cuida en este país, no sólo para el Covid-19, para muchas otras enfermedades; esto último no sólo ha dependido de nosotros, estamos en un contexto muy difícil para llevar una vida sustentable.

Conozco perfectamente los 17 Objetivos del Desarrollo Sostenible de la ONU, muy pocos se pueden aplicar aquí en nuestro país. Recientemente publiqué una imagen de un niño mostrando su talento en la danza clásica, vivimos en un mundo global y las oportunidades no tienen esta característica.

Los adultos debemos tomar una decisión personal, tenemos el libre albedrío de hacerlo y más allá de tomar la sana distancia que debemos respetar, de constantemente lavarse las manos, ¡por favor! use un cubrebocas y unos lentes, siempre que esté fuera de casa. Hoy está la teoría de que el Covid se propaga en el ambiente, mientras más nos protejamos, más pronto tendremos una mejor calidad de vida.

No importa si trabaja en un mercado ambulante, en uno fijo, si vende tortas, si está en un espacio cerrado, si tiene su despacho en el edificio con la mayor plusvalía, siempre use el cubrebocas y los lentes. Por usted, por mí, sobre todo por los niños y jóvenes, también se enferman y contagian.

Ojalá me escriba a lizyuaslp@gmail.com y gracias por todos sus comentarios.

La mejor decisión ante el Covid-19

No hay marcha atrás en este mundo, la globalización es irreversible. Sin embargo, aún cuando los efectos son similares, cada nación ha tomado las propias decisiones ante la pandemia del Covid-19; en contexto sociales, económicos y democráticos, completamente distintos. Estamos en momentos muy difíciles para todos.

Ninguno quedamos exentos de las consecuencias negativas del hoy, la globalización y las tecnologías tienen sus bondades. El Covid-19 empezó en China, se extendió por todo el mundo y cada día escuchamos informaciones nuevas sobre la situación de la enfermedad, además del trágico dolor de las muertes.

El tema de los medicamentos nos ocupa como la duda de cuándo estarán las vacunas. Son visibles las contradicciones de los países, también de los grupos de comunidades científicas. Comprendemos que son imposibles las certezas en este momento, pero hay decisiones “esquizofrénicas” que se han tomado.

En diciembre del 2019, cuando apareció esta enfermedad recordé todas las pandemias que se han presentado en China y en otros países; en su momento pregunté si iba a llegar a México y las primeras afirmaciones de los expertos eran que no. Como periodista me enseñaron a dudar, a preguntar, a cuestionar, y yo sabía que nos iba a llegar.

Entonces me preparé en lo que pude con insumos, claro que la gente más cercana me comentaba que era una exagerada. El tiempo comprobó la veracidad de mis afirmaciones, he conocido la situación de la enfermedad gracias a Internet y a los contactos que tengo en países representativos, de todas las zonas de este planeta. He escrito correos electrónicos a los gobiernos, de diferentes ideologías, muchos me han contestado; he preguntado sobre lo que se ha hecho bien y lo que se ha hecho mal. He visto todas las conferencias de México, de San Luis Potosí y de algunos otros estados.

Tengo coincidencias y divergencias, hay una necesidad de salir para trabajar y la mayoría de la población no se cuida en este país, no sólo para el Covid-19, para muchas otras enfermedades; esto último no sólo ha dependido de nosotros, estamos en un contexto muy difícil para llevar una vida sustentable.

Conozco perfectamente los 17 Objetivos del Desarrollo Sostenible de la ONU, muy pocos se pueden aplicar aquí en nuestro país. Recientemente publiqué una imagen de un niño mostrando su talento en la danza clásica, vivimos en un mundo global y las oportunidades no tienen esta característica.

Los adultos debemos tomar una decisión personal, tenemos el libre albedrío de hacerlo y más allá de tomar la sana distancia que debemos respetar, de constantemente lavarse las manos, ¡por favor! use un cubrebocas y unos lentes, siempre que esté fuera de casa. Hoy está la teoría de que el Covid se propaga en el ambiente, mientras más nos protejamos, más pronto tendremos una mejor calidad de vida.

No importa si trabaja en un mercado ambulante, en uno fijo, si vende tortas, si está en un espacio cerrado, si tiene su despacho en el edificio con la mayor plusvalía, siempre use el cubrebocas y los lentes. Por usted, por mí, sobre todo por los niños y jóvenes, también se enferman y contagian.

Ojalá me escriba a lizyuaslp@gmail.com y gracias por todos sus comentarios.