¡TESOROS DE VIDA ETERNA!
DIOS CRISTO JESUS en Mateo 6:19-21 de la Biblia, nos dice: “No hagan tesoros en la Tierra, donde la polilla y el óxido destruyen, y donde los ladrones minan y hurtan”; y, por el contrario, Jesús nos manda hacer Tesoros en el Cielo, donde la polilla, el óxido y los ladrones no tienen cabida, porque en esta Casa de Dios sólo es posible que habiten los seguidores conversos y salvos de Jesús, a quienes este Señor perdona sus pecados cuando arrepentidos reciben a Cristo como su único Salvador, y les proporciona el perfecto Tesoro Espiritual de la Salvación y Vida Eterna.
Con los festejos de este mes en que recordamos a nuestros familiares y conocidos fallecidos, podemos reflexionar que, tarde que temprano también nosotros tendremos que dejar físicamente este mundo, y Dios Cristo con lo anterior nos invita para que en forma voluntaria aceptemos sus Tesoros de Vida Eterna para escapar de la muerte espiritual que nos acarrea el pecado y el peligro de ir al castigo del fuego del infierno.
Al respecto, Jesús también predicó acerca de sus Tesoros Divinos en el Sermón de la Montaña, de los cuales gozan quienes lo tienen como Salvador, a quienes se dirige para: “Mirad las aves del cielo, que no siembran ni cosechan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? Y asimismo Jesús llama a sus creyentes para no apegarse a las cosas materiales, o sea, a: “Lo qué habéis de comer, beber y vestir, porque es más la vida que el alimento, y el cuerpo más que el vestido”; siendo lo supremo perfecto: “Buscar primeramente el Reino de Dios y su Justicia, para que todo lo demás nos sea añadido”, cimentado en la Salvación y Vida Eterna, según Juan 3:16.
Estimado Lector: eres muy distinguido y apreciado por Jesús quien te invita a recapacitar para que antes de partir de este mundo, hagas tuyos sus Tesoros de Vida Eterna, con sólo decirle: “Mi Señor Dios Cristo, ¡SALVAME!, me arrepiento ante Ti de mis pecados, perdóname y límpiame con tu Sangre Divina derramada en la cruz del Calvario, creo en Ti y te recibo como Unico, Suficiente y Perfecto salvador Personal”.
Muchas gracias, que Dios los bendiga ricamente, y si El permite continuaremos el viernes siguiente. Mi teléfono a sus órdenes es el 815-39-73.