Con motivo de la proximidad del Día de la Candelaria, inicia la tradición de la venta de atuendos para vestir al Niño Dios que van desde 40 pesos para figuras pequeñas, hasta 170 pesos los más grandes.
Y es que, cada 2 de febrero se celebra el pasaje bíblico de la presentación del Niño Jesús al Templo de Jerusalén, y tiene gran arraigo en la población católica que ‘lo visten’ y llevan a la iglesia para ser bendecido.
En este aspecto, la comerciante Verónica Torres, compartió a El Sol de San Luis que tiene alrededor de 13 años dedicada a la venta y confección de vestimenta para estas figuras religiosas gracias a la herencia familiar, que en principio, se ha dedicado al comercio y segundo, su madre le inculcó hacer los vestidos, pero tejidos.
Además, tras realizar estudios en ‘corte y confección’ decidió hacer lo propio no en personas, sino llevando la enseñanza de su mamá de confeccionar para el ‘niño Dios’.
“MI mamá falleció hace un año, y ella siempre me decía que tejiera vestiditos, porque ella así los hacía, y bueno, fue una herencia de mi madre y sí los hacía, tejidos, pero ahora los confecciono en tela”, expresó.
Entrevistada en el puesto que instala en este municipio, tiene a la vista una gran variedad de vestidos en telas como raso, organza, tule, entre otras, así como modelos en colores brillantes, con listones de colores, encajes, elásticos, trajes de gala o sencillos, y hasta con accesorios como diminutos sombreros, zapatos y guaraches, para todos los gustos y bolsillos.
Diseños sencillos y con gran complejidad como los ‘ropones’, además de la silla de madera para sentar al Niño, pero “ahorita -a venta está floja, poca gente, lo que pasa es que actualmente hay mucha competencia de lo mismo, pero ahí la llevamos, me va bien, no me quejo”, indicó tras indicar que pese a eso, todo el año los confecciona, y en estas fechas, 6 de enero y 2 de febrero, que son los días de más tradición, hace entre 5 o 6 vestidos al día.
El costo de los vestidos, en talla 0 que es el más pequeño tiene un costo de 40 pesos; la talla 25, 100 pesos y talla 45, el más grande en 170 pesos.
Pero también vende las figuras, para quien no solamente quiera el atuendo, la más grande en 250 pesos, el pequeño que es plástico, en 20 pesos, “los traigo de San Juan de Los Lagos y Tonalá en Jalisco, y Dolores, Hidalgo”.
Verónica se instala los sábados y domingos a un costado de la Parroquia de Nuestra Señora la Soledad, y en la calle Zaragoza, en la cocina económica “alismar”, en donde se le puede encontrar para aquellos que buscan cumplir con la tradición de levantar esta figura del nacimiento por parte de los padrinos y confeccionarle un atuendo para ser presentado en la iglesia el 2 de febrero.
Así, se pudo observar a las personas acercarse al puesto de Verónica, en busca del modelo y precio que más les agradaba para sus figuras que llevan en canastas o cargan tal como a un niño pequeño envuelto en cobijas.