/ miércoles 15 de noviembre de 2023

Opinión | La navidad es un día que esperamos todo el año

Los días y los meses han pasado velozmente. Encontramos ya en nuestras agendas las fiestas prenavideñas y también las posadas.

La navidad es un día que esperamos todo el año y para estas fechas en las que ya se aproximan, la decoración y los preparativos invocan la celebración con alegría y las y los niños con una gran ilusión.

La cual no tiene límites fronterizos ni considera idioma, raza, color, nacionalidad. Es un tiempo pleno de convivencia, amor y reunión con las personas más queridas en torno al nacimiento del Hijo de Dios, a quien recibimos con nacimientos, villancicos, luces, el pino, los adornos, una deliciosa cena y muchos, muchos abrazos!

Pero también hay otra perspectiva de la navidad. La del gasto en suntuosos regalos, la del desenfreno festivo, borrachera y el materialismo. Dándole a tan hermosa fecha un aspecto de superficialidad que deja de lado el regalo universal de la llegada del redentor quien vino al mundo de la forma más humilde, teniendo toda la grandeza, la realeza y la majestad.

Hagamos fiesta por su venida, por su entrada a nuestros corazones. Que la cena y el regalo no sea lo sustancial, que lo más importante sea pasar una noche buena en donde lo primordial sea la bienvenida de Jesús junto a quienes más amamos.

Y si por cualquier motivo estamos lejos de ellas o ellos, que donde quiera que se encuentren nos una el amor a Dios que ha nacido y que es el verdadero significado de la navidad.

Decía que la época navideña está comenzando, vienen tiempos de paz, tiempos de perdón, de unión familiar y de amor.

Deseo que los hermosos momentos que se avecinan, sean propicios para que revisemos nuestro interior y centremos nuestro ser en la verdadera navidad, que sea la más grandiosa celebración en el año, que la familia y la salud sean el regalo más grande y que el Príncipe de Paz llene nuestros corazones.

Los días y los meses han pasado velozmente. Encontramos ya en nuestras agendas las fiestas prenavideñas y también las posadas.

La navidad es un día que esperamos todo el año y para estas fechas en las que ya se aproximan, la decoración y los preparativos invocan la celebración con alegría y las y los niños con una gran ilusión.

La cual no tiene límites fronterizos ni considera idioma, raza, color, nacionalidad. Es un tiempo pleno de convivencia, amor y reunión con las personas más queridas en torno al nacimiento del Hijo de Dios, a quien recibimos con nacimientos, villancicos, luces, el pino, los adornos, una deliciosa cena y muchos, muchos abrazos!

Pero también hay otra perspectiva de la navidad. La del gasto en suntuosos regalos, la del desenfreno festivo, borrachera y el materialismo. Dándole a tan hermosa fecha un aspecto de superficialidad que deja de lado el regalo universal de la llegada del redentor quien vino al mundo de la forma más humilde, teniendo toda la grandeza, la realeza y la majestad.

Hagamos fiesta por su venida, por su entrada a nuestros corazones. Que la cena y el regalo no sea lo sustancial, que lo más importante sea pasar una noche buena en donde lo primordial sea la bienvenida de Jesús junto a quienes más amamos.

Y si por cualquier motivo estamos lejos de ellas o ellos, que donde quiera que se encuentren nos una el amor a Dios que ha nacido y que es el verdadero significado de la navidad.

Decía que la época navideña está comenzando, vienen tiempos de paz, tiempos de perdón, de unión familiar y de amor.

Deseo que los hermosos momentos que se avecinan, sean propicios para que revisemos nuestro interior y centremos nuestro ser en la verdadera navidad, que sea la más grandiosa celebración en el año, que la familia y la salud sean el regalo más grande y que el Príncipe de Paz llene nuestros corazones.