/ martes 12 de marzo de 2024

Imagen y estilo | ¡In memoriam de Chapita!

Hoy dedico éste espacio a un extraordinario y buen amigo el Lic. Carlos Alberto Ordoñez Voguel, notario público No 28 a quien todos decíamos Chapa, y quien partió a la Casa del Padre en días pasados, tras una enfermedad irreversible pero a pesar de ella, siempre fuerte hasta el final.

Recuerdo que yo andaba cumpliendo los 21 años de edad, (tengo 65 imagínense ustedes), me faltaban escasos meses para concluir mi Universidad cuando un buen día, se cruza en mi camino Sergio Delmar Junco, quien fue mi mentor de tesis, de profesión, de cuanto aprendí a lo largo de mi vida y quien me llevó a mi primer trabajo en su Agencia de Publicidad, ubicada en Jardín Hidalgo No 7.

Ahí en el despacho de Jardín Hidalgo, lugar privilegiado, conocí a 3 grandes amigos, quienes eran vecinos de nosotros. Me refiero al despacho BARRERA, ORDOÑEZ, NIETO. O sea a los abogados Gustavo Barrera López, Carlos Alberto Ordoñez Voguel y Ramón Nieto Navarro.

Desde que los conocí (a los 3) los recuerdo siempre activos, siempre súper trabajadores, siempre creciendo como la espuma, muy profesionales, ocupando cargos muy importantes, siempre sencillos y mejores amigos.

Hace unos días recibo la noticia del fallecimiento de Chapa Ordoñez, no lo podía creer, ya que en los últimos meses nos vimos varias veces, platicamos mucho, recordamos bastante esos viejos tiempos, además de asesorarme personalmente en mis asuntos junto con Gustavo, dándome los mejores consejos.

Recordabamos aquel viaje a la Expo Sevilla en España, en donde estando allá, nos fuimos a conocer Granada, visitamos la famosa Alhambra, nos persiguieron los gitanos y por tal motivo nos metimos, sin fijarnos a los extensos jardines de la Alhambra, en donde por supuesto nos perdimos, nadie nos encontraba, no podíamos salir de ese vericueto jardín. Yo, lloraba de la mortificación, Chapa con su buen humor se puso a tomar fotos, hasta que por fin nos encontraron.

A lo largo de mi vida profesional, siempre estuvo presente, muy frecuentemente nos veíamos en comidas empresariales, en todas y cada una de las tomas de protesta de los diferentes organismos empresariales, Canacintra, Canaco, Ipac, Coparmex, en la mayoría de las tomas de protesta de los diferentes gobiernos Estatales y Municipales.

Iba siempre no un paso delante de las noticias, muchos más. Iba adelante contra todo pronóstico, lo que auguraba se cumplía, era visionario, capaz, humano, profesional y políticamente inteligente.

Recuerdo aquella reunión en casa de nuestra mutua amiga Maru Díaz Infante, en donde Chapa, Gustavo, Lalo Medina y yo, nos dieron las altas de la madrugada, disfrutando de la plática sobre infinidad de temas y obvio lo que se pronosticó en aquella ocasión, ocurrió.

Desde este espacio envió mis más sinceras condolencias a sus hermanos Eduardo y Ana Patricia, cuñados; Mayra Galindo y Fernando Domínguez, a su tía María de los Angeles (la Güera) Salas Bremaunt, sobrinos: Mayra, Ana y Patricia Ordoñez Galindo, Fernando y Camila, y Andrés Domínguez Ordoñez.

Mi solidaridad para todos los colaboradores de su notaria, quienes tendrán la presencia de su Jefe y amigo día con día.

Para sus entrañables amigos Gustavo y Ramón, no tengo palabras para expresarles, saben que lo siento muchísimo, los abrazo con el corazón.

Me despido con la siguiente reflexión de David Harkins “Recuérdame”

Puedes llorar porque se ha ido, o puedes\u0009

sonreír porque ha vivido.

Puedes cerrar los ojos

y rezar para que vuelva o puedes abrirlos y ver todo lo que ha

dejado;

tu corazón puede estar vacío

porque no lo puedes ver,

o puede estar lleno del amor

que compartisteis.

Puedes llorar, cerrar tu mente, sentir el

vacío y dar la espalda,

o puedes hacer lo que a ella le gustaría:

sonreír, abrir los ojos, amar y seguir.

Que tengan una excelente semana y les invito para que sigan mi página en Facebook, agradeceré sus comentarios, que leeré con atención.

Ana María Valdéz Castrejón

Hoy dedico éste espacio a un extraordinario y buen amigo el Lic. Carlos Alberto Ordoñez Voguel, notario público No 28 a quien todos decíamos Chapa, y quien partió a la Casa del Padre en días pasados, tras una enfermedad irreversible pero a pesar de ella, siempre fuerte hasta el final.

Recuerdo que yo andaba cumpliendo los 21 años de edad, (tengo 65 imagínense ustedes), me faltaban escasos meses para concluir mi Universidad cuando un buen día, se cruza en mi camino Sergio Delmar Junco, quien fue mi mentor de tesis, de profesión, de cuanto aprendí a lo largo de mi vida y quien me llevó a mi primer trabajo en su Agencia de Publicidad, ubicada en Jardín Hidalgo No 7.

Ahí en el despacho de Jardín Hidalgo, lugar privilegiado, conocí a 3 grandes amigos, quienes eran vecinos de nosotros. Me refiero al despacho BARRERA, ORDOÑEZ, NIETO. O sea a los abogados Gustavo Barrera López, Carlos Alberto Ordoñez Voguel y Ramón Nieto Navarro.

Desde que los conocí (a los 3) los recuerdo siempre activos, siempre súper trabajadores, siempre creciendo como la espuma, muy profesionales, ocupando cargos muy importantes, siempre sencillos y mejores amigos.

Hace unos días recibo la noticia del fallecimiento de Chapa Ordoñez, no lo podía creer, ya que en los últimos meses nos vimos varias veces, platicamos mucho, recordamos bastante esos viejos tiempos, además de asesorarme personalmente en mis asuntos junto con Gustavo, dándome los mejores consejos.

Recordabamos aquel viaje a la Expo Sevilla en España, en donde estando allá, nos fuimos a conocer Granada, visitamos la famosa Alhambra, nos persiguieron los gitanos y por tal motivo nos metimos, sin fijarnos a los extensos jardines de la Alhambra, en donde por supuesto nos perdimos, nadie nos encontraba, no podíamos salir de ese vericueto jardín. Yo, lloraba de la mortificación, Chapa con su buen humor se puso a tomar fotos, hasta que por fin nos encontraron.

A lo largo de mi vida profesional, siempre estuvo presente, muy frecuentemente nos veíamos en comidas empresariales, en todas y cada una de las tomas de protesta de los diferentes organismos empresariales, Canacintra, Canaco, Ipac, Coparmex, en la mayoría de las tomas de protesta de los diferentes gobiernos Estatales y Municipales.

Iba siempre no un paso delante de las noticias, muchos más. Iba adelante contra todo pronóstico, lo que auguraba se cumplía, era visionario, capaz, humano, profesional y políticamente inteligente.

Recuerdo aquella reunión en casa de nuestra mutua amiga Maru Díaz Infante, en donde Chapa, Gustavo, Lalo Medina y yo, nos dieron las altas de la madrugada, disfrutando de la plática sobre infinidad de temas y obvio lo que se pronosticó en aquella ocasión, ocurrió.

Desde este espacio envió mis más sinceras condolencias a sus hermanos Eduardo y Ana Patricia, cuñados; Mayra Galindo y Fernando Domínguez, a su tía María de los Angeles (la Güera) Salas Bremaunt, sobrinos: Mayra, Ana y Patricia Ordoñez Galindo, Fernando y Camila, y Andrés Domínguez Ordoñez.

Mi solidaridad para todos los colaboradores de su notaria, quienes tendrán la presencia de su Jefe y amigo día con día.

Para sus entrañables amigos Gustavo y Ramón, no tengo palabras para expresarles, saben que lo siento muchísimo, los abrazo con el corazón.

Me despido con la siguiente reflexión de David Harkins “Recuérdame”

Puedes llorar porque se ha ido, o puedes\u0009

sonreír porque ha vivido.

Puedes cerrar los ojos

y rezar para que vuelva o puedes abrirlos y ver todo lo que ha

dejado;

tu corazón puede estar vacío

porque no lo puedes ver,

o puede estar lleno del amor

que compartisteis.

Puedes llorar, cerrar tu mente, sentir el

vacío y dar la espalda,

o puedes hacer lo que a ella le gustaría:

sonreír, abrir los ojos, amar y seguir.

Que tengan una excelente semana y les invito para que sigan mi página en Facebook, agradeceré sus comentarios, que leeré con atención.

Ana María Valdéz Castrejón