Según datos de la dirección nacional de Epidemiología de la Secretaría de Salud del gobierno de la República Mexicana durante el año 2020 en todo el país se contabilizaron 1366 casos de hepatitis con una taza de incidencia nacional de 1.06 casos por cada 100 mil habitantes. Aunque la delegación estatal del Instituto Mexicano del Seguro Social, IMSS, no reporta las cifras oficiales de esta enfermedad en el estado, al menos hace una alerta a la población para tomar precauciones hacia esta enfermedad.
La Hepatitis C es una enfermedad vírica que se transmite a través de la sangre, la saliva o el semen, su periodo de incubación, su evolución y su sintomatología son similares a los de la tipo b y básicamente se trata de la inflamación del hígado.
Es un proceso inflamatorio que afecta al hígado, causado por el virus de la Hepatitis C y cuyo medio de trasmisión es la exposición a fluidos corporales, como puede ser la sangre o secreciones.
En algunas ocasiones, puede manifestarse con dolor abdominal localizado en la región del hígado, y su intensidad puede variar entre un dolor leve por algunas semanas, a uno agudo e intenso.
Para diagnosticar inflamación del hígado o hepatitis es necesario hacer pruebas de funcionamiento y detectar qué la está causando. Entre las posibles causas de la inflamación están el consumo de bebidas alcohólicas, la ingesta de algunos medicamentos o el ataque de un virus.
Para saber si está presente el virus, se realiza una prueba que consiste en un pequeño pinchazo en el dedo para obtener una gota de sangre y efectuar su análisis, según explicó el coordinador auxiliar de Gestión Médica del IMSS, Leonardo Solano Campos.
No existe vacuna para prevenirla, pero hay otras maneras de reducir el riesgo de infectarse, como el mantener una higiene personal adecuada, no compartir cepillo de dientes, instrumentos afilados o cortantes, evitar prácticas sexuales de riesgo y utilizar medidas de protección, como el uso de preservativos.
Si las personas desean realizarse algún tatuaje o perforación, es necesario verificar que los establecimientos cuenten con los protocolos adecuados de higiene y esterilización de las herramientas para poder ofrecer el servicio.
Afecta principalmente al hígado y una de las complicaciones es la cirrosis, también puede ser causa de cáncer hepático, por lo que es de suma importancia el realizar un diagnóstico de forma temprana y establecer un tratamiento farmacológico oportuno, a fin de prevenir estas complicaciones.
El IMSS otorga medicamentos conocidos como antivirales de acción directa para la atención de este padecimiento, lo que genera una tasa de curación de hasta 95 por ciento de los pacientes que son diagnosticados de forma temprana.
Para poder ofrecer el tratamiento médico a los pacientes, es necesario realizar un tamizaje, mediante pruebas confirmatorias para poder determinar el tipo de virus que presenta y, dependiendo del subtipo, se suministra el tratamiento médico.
Precisó que hasta el 80 por ciento de las personas con infección aguda por virus de hepatitis C son asintomáticas y cuando hay algunos, suelen ser, coloración amarilla en ojos y piel, tonalidad oscura en la orina, heces en color blanco y dolor de leve a moderado en el hígado.
Es importante mencionar que alrededor del 70 por ciento de las personas con esta infección pueden evolucionar a formas crónicas de la enfermedad, desarrollando complicaciones.
“El hígado es sólo una parte de todo nuestro cuerpo, si bien hoy estamos enfatizando tanto una enfermedad que es la inflamación o la hepatitis y que es un órgano importante, en realidad es parte de un todo, y buenos alimentos, ejercicio, nos ayuda a prevenir otras enfermedades, del corazón, de los riñones, es necesario prevenir otras enfermedades que nos pueden atacar el hígado”.
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