Aseguradoras niegan servicio a transportistas debido a la incidencia delictiva

Aunque sí hay aseguradoras que dan cobertura a transporte de carga, también hay transportistas que están en lista negra, señaló Gerardo de la Garza Ramírez, presidente nacional de la Asociación Mexicana de Agentes de Seguros y Fianzas (AMASFAC).

Luego de las quejas que se han dado desde el sector transportista respecto a que las aseguradoras les niegan el servicio debido a la incidencia delictiva en las carreteras, De la Garza Ramírez afirmó que sí hay aseguradoras que dan el servicio a transporte de carga, sin embargo indicó que hay algunas de ellas “con lista de choferes negligentes, sobre todo en manejo”.

Acusó que hay transportistas “ya muy quemados porque no le dan mantenimiento a las unidades, no capacitan a los choferes, creen que las aseguradoras están para aceptar todas las pérdidas”, y destacó que deben tomar en cuenta que se trata de una responsabilidad compartida entre autoridades, empresarios y aseguradoras.

Mencionó que por ejemplo, hay aseguradoras que ofrecen planes de trabajo a los transportistas para prevenir y responder mejor ante los accidentes, también les piden laborar en horarios diurnos, que se protejan, que resguarden los camiones, que utilicen carreteras de cuota, que tengan choferes bien capacitados, y hagan uso de herramientas como cámaras y GPS.

Insistió en que en este caso hay una responsabilidad compartida, por lo que también dijo esperar que las autoridades ayuden a contar con carreteras más seguras.

De la Garza Ramírez también reconoció que se han incrementado los costos de los seguros, en los automotores debido a que éstos han subido de precio y se da cobertura de acuerdo al valor comercial de la unidad, y en el seguro médico, debido a las nuevas tecnologías que se han incorporado; como ejemplo mencionó que para atender la fractura de un brazo se pueden ofrecer dos opciones por parte de los médicos: inmovilizar por unos meses con férula por 10 mil pesos, o colocar tensores externos que permiten mover el brazo y una recuperación más rápida, por 250 mil pesos, “la diferencia es exponencial”.