A pesar de que la violencia familiar es uno de los delitos que más llamadas de auxilio registran los números de emergencia y que más son atendidos por parte de elementos de la Guardia Civil del Estado, en enero de 2024 este delito registró una disminución de 11 por ciento con relación al mismo mes de 2023, con 84 casos menos.
Así lo dio a conocer el vocero de seguridad Miguel Gallegos Cepeda, quien dijo que de 2022 a 2023 en todo el año la violencia familiar registró un incremento del 5.0 por ciento, los más afectados siguen siendo los niños y las mujeres.
Comentó que lo anterior es reflejo de la descomposición social que se ha recrudecido de muchos años a la fecha y sobre todo, “porque prácticamente no había programas, no había un interés por parte de los gobiernos anteriores para poner la atención a este tema”.
Gallegos Cepeda atribuyó la disminución en la violencia familiar a resultados de las campañas permanentes que se implementan desde el gobierno del estado a través de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPCE) y que están replicando y que hay que replicarse cada vez más desde las diferentes instituciones.
Detalló que las campañas de prevención contemplan una serie de actividades, talleres, pláticas, acercamiento con los diferentes sectores sobre todo el educativo, donde intervienen padres de familia, el alumnado, docentes y directivos de las instituciones con la intención de llevar el mensaje de la importancia que tiene la familia como base de la de la sociedad.
“La campaña ha dado resultados a través de unidad de esfuerzos de las diferentes dependencias del gobierno, está abarcándose prácticamente todo el estado no solamente en la zona conurbada, también los municipios y comunidades alejadas para que disminuya, ese flagelo”.
El vocero lamentó que siga siendo el consumo de alcohol u otras sustancias adicticas los detonantes de la violencia en el hogar, y celebró por otro lado, el incremento en la cultura de las víctimas por tener el valor y denunciar.
“Lamentablemente cuando existen espacios o tiempos que deberían ser utilizados o focalizados para la convivencia familiar, esa convivencia podría generar un mayor riesgo cuando existe el consumo de bebidas alcohólicas y el consumo de de drogas, entonces la convivencia puede salirse de control, y esa seguridad en lo familiar por esos detalles queda anulada, los más afectados en su propio hogar siguen siendo los niños y las mujeres”.