Más de 170 árboles han sido retirados en distintos puntos de la ciudad “por riesgo inminente”, aseveró el director de Servicios Municipales del Ayuntamiento capitalino, Christian Iván Azuara Azuara, aunque aclaró que todos ellos han sido restituidos de acuerdo con lo que marca la normatividad.
Destacó que por semana, la dependencia a su cargo recibe de 30 a 40 solicitudes para poda o tala de árboles, pero antes de proceder a la acción se debe contar con un diagnóstico, si es necesario lo primero o lo segundo.
Muchas de ellas, sin embargo, no están justificadas debido a que solamente se trata de aspectos estéticos, o porque “tapan” la fachada de algún establecimiento o, en la mayoría de os casos, porque generan mucha basura por ramas
Al momento, se han hecho 492 podas de manera profesional y se les ha dado mantenimiento a 356 áreas verdes.
Un particular, por su cuenta, no puede realizar alguna acción si no hay un permiso y, aunque sí se han dado casos, gracias a denuncias se han aplicado sanciones, tanto económicas como de reposición de árboles.
“Debe haber una campaña de educación ambiental, decirle a los vecinos que solamente con permiso se puede talar o podar”, dijo; los diagnósticos generalmente los da Protección Civil, quien define los riesgos, o Interapas, cuando el árbol está afectando infraestructura hidráulica.
Las sanciones para quienes realicen esta actividad sin permiso llegan a ser de entre 60 y 70 UMAs de acuerdo al daño causado.
Azuara Azuara recordó el caso reciente de un árbol de la avenida Venustiano Carranza, próximo a la calle Benigno Arriaga, que registró no una tala sino una poda excesiva, y que a la fecha ya presenta nuevos brotes; en ese caso, a los responsables se les sancionó por ello y por no contar con permiso.