- Para ingresar a las Fuerzas Armadas se requiere vocación. Citlali
La participación de las mujeres dentro de la milicia en actividades que antes eran propias de los hombres, ha causado sorpresa por sus capacidades al desempeñar funciones que antes no se les consideraba propias para ellas, manejan la información y las armas de igual forma que los hombres.
Así lo destacó el Teniente Coronel de Infantería D.E.M. José Rafael Jiménez Bermúdez, subjefe de Estado Mayor de la 12ª. Zona Militar, “somos una institución comprometida con las metas presidenciales, en lo que respecta a la integración de la mujer a las actividades castrenses de manera conjunta con los hombres, como Fuerzas Armadas y como Secretaría de Estado estamos muy comprometidos en integrar a las mujeres, y hay muchas que se han destacado en sus actividades en el día a día”.
Las mujeres dentro de la milicia, realizan actividades administrativas y operativas de la mano con el personal masculino, “sin mayor problema y sin distinción alguna realizando las mismas actividades como Plan DN-III-E, labor social, actividades educativas, y patrullajes en la Guardia Nacional”.
En cumplimiento con la premisa de equidad, ya se reciben mujeres en especialidades que antes eran exclusivas de los hombres, “hay mujeres en el arma de Artillería GN, PM, infantería y administración, las mujeres tienen mucho potencial y pueden incorporarse a casi todas las tareas con la única distinción del aspecto biológico”.
El jefe Bermúdez dijo que las mujeres han sorprendido también al adaptarse fácilmente a un entorno meramente masculino, “nos ha sorprendido como se han adaptado independientemente de las situaciones que pudieran presentarse por la condición de ser mujer, día con día hay mujeres patrullando y en operativos y hacen un buen papel”.
Sobre la aceptación del personal masculino a las féminas en las filas castrenses, el Teniente Coronel dijo que poco a poco se han ido adaptando, “no era muy común ver a una mujer soldado, hoy por hoy nos hemos acostumbrado a que debemos de trabajar formando un equipo de trabajo”.
Por su parte, la Sargento Segundo de Transmisiones Mayra Alejandra Castillo Vargas, asegura que a nueve años de servicio dentro del Ejército, el trato y las oportunidades han venido igual para hombres para las mujeres que poco a poco han ido ganando espacios.
“Ya somos un buen efectivo dentro del servicio de transmisiones tanto de oficiales como de clase, Transmisiones es uno donde los servicios que comenzó a integrar mujeres a sus filas, venimos a invadir el espacio de los hombres”.
Y aunque la vida militar no es fácil, tampoco es difícil hacer equipo, patrullar y coordinar trabajo con sus compañeros varones, “establecemos enlace como uno más e ellos, vamos en las camioneta con ellos, y ya hay mujeres en las bases de operaciones, lo que nos distingue no es la capacidad de hacer o no hacer las cosas, sino la manera de resolver las cosas, la fuerza física no es la misma pero para todo hay mañas”.
La sargento dijo que para muchas jóvenes es llamativo ingresar al Ejército por el manejo de las arma, “uno entra con la idea de que vas a andar con arma, y sí todos recibimos adiestramiento, donde se enseña a manejar las armas, ya dependiendo de a que arma o servicio elijan será si traigan su arma diariamente o no”.
“Estamos en otros tiempos en los que ya no jugamos a la planchita o a las comiditas, jugamos parejo y eso ha permitido que el ejército tenga esa apertura, el reclutamiento es una buena oportunidad, con un lugar seguro para estudiar y para trabajar”.
Citlali, Teniente Cirujano dentista destacó los reglamentos y códigos de comportamiento que deben acatar tanto hombres como mujeres, “hacemos un curso básico donde nos enseñan las normativas, tenemos hombres y mujeres un salario con base al cargo y jerarquía, tenemos las mismas oportunidades de ir a cursos de formación, de promoción, las mismas obligaciones y responsabilidades, pero incursionar en las Fuerzas Armadas requiere de vocación”.