El Mercado de productos naturales y orgánicos Macuilli Teotzin que surgió como una colaboración entre productores y la Facultad de Agronomía y Veterinaria de la UASLP, celebró su séptimo aniversario; por ello en este 2019 anuncia que llevará a cabo la primera comercialización de productos, en el lugar que los asiduos potosinos conocen, ubicado en Avenida Niño Artillero este sábado 12 de enero, a partir de las 11 de la mañana.
El doctor Ramón Jarquín Gálvez, catedrático de la Facultad de Agronomía y Veterinaria, y coordinador del mercado Macuilli Teotzin, platicó del objetivo de este proyecto. “Parte del reto fue establecer un punto de venta directo de producción y consumo responsable; la formación de los estudiantes en el área agroecológica requería necesariamente un espacio de interacción con el sector social y cerrar el círculo de producción y comercialización.
Bajo esta acción fueron rompiendo algunos mitos, y gradualmente demostraron que los productos orgánicos certificados legalmente pueden ser accesibles con un precio razonable para el consumidor, “la reacción de los consumidores nos ha impulsado a seguir, llevamos siete años en esta actividad. Iniciamos en el garaje de un estudiante, y ahora nos ubicamos sobre Niño Artillero en un espacio visible”.
Jarquín Gálvez, explicó el concepto de productos orgánicos a la población que aún no tiene acercamiento, “un producto orgánico es aquel que ofrece la garantía al consumidor de una certificación que está bajo los lineamientos establecidos en el marco mundial y nacional”.
Desde 2006, existe una ley de productos orgánicos que rige toda la actividad del sector en el país, derivado de ello, se ha complementado este marco regulatorio desde el 2013, situación que nos obliga a respetar esas leyes estableciéndose como principio fundamental la verificación de la calidad orgánica.
“Es decir, estas prácticas agroecológicas deben realizarse dentro de ese marco regulatorio que permiten al consumidor tener la garantía que está dentro de esa ley y puede ostentar el concepto orgánico”.
La mayoría de los productores del Mercado Macuilli Teotzin están activos desde el inicio en el año 2011. Gradualmente han mejorado sus prácticas para tener una certificación orgánica, para ello, necesitan cumplir el cien por ciento la normativa.
“El año pasado otorgamos alrededor de nueve certificados, y el resto están en proceso porque la ley determina tres años consecutivos de supervisión, evaluación, seguimiento, para dar una garantía al consumidor. Posteriormente, pueden utilizar el distintivo nacional que está registrado y monitoreado constantemente por las secretarias correspondientes”.
De la cultura de consumir productos orgánicos en el país, el académico manifestó que ha aumentado, debido que las nuevas generaciones están permeadas con el concepto de la conservación ambiental, “hay diversos estudios que demuestran que cuando se habla de conservación ambiental se relaciona con productos verdes y orgánicos. Esto de entrada ha llamado la atención a nivel mundial, en México ha ido creciendo, y en San Luis Potosí, también”.
El concepto Macuilli Teotzin va más allá, no solo es la parte técnica de protección ambiental, también es el sentido social, la intención de contribuir para que los campesinos, productores, agricultores obtengan un beneficio y respaldo desde el punto de vista técnico.