Al menos 80 jóvenes fueron aseguradas el fin de semana por faltas al Bando de Policía y Buen Gobierno, incluyendo menores de edad que son canalizados al área de Trabajo Social y, a su vez, devueltos a sus familiares.
El director general de Seguridad Pública capitalina, Juan Antonio Villa Gutiérrez, señaló que la corporación a su cargo atiende en promedio de una a dos riñas pandilleriles, principalmente en colonias del sur de la ciudad.
Aclaró que la riña ocurrida hace unos días que derivó en el homicidio de una mujer en la colonia Progreso, se originó por cuestiones familiares.
Señaló que el último padrón que se tiene señala que en la capital potosina operan alrededor de 600 pandillas juveniles, cuyos integrantes varían de los tres o más; ese padrón será actualizado en breve como parte de las estrategias a seguir para combatir los delitos del fuero común.
En el caso de los menores de edad, el jefe policiaco indicó que hasta el momento no se ha detectado a alguno en la incursión de delitos, sino que han sido detenidos por faltas administrativas, generalmente por escandalizar en vía pública. En estas situaciones, son canalizados a Trabajo Social y entregados a sus padres o tutores, con la recomendación de reencaminarlos.
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