Daniel Venegas Galván, es un joven poeta que encontró en las letras, una forma de desahogarse y ser feliz. Su inspiración llega regularmente por las noches y tras dos años de descubrir su verdadera pasión, ya cuenta con 35 poemas y dos novelas.
Estudiante de la Escuela Normal Superior “Camilo Arriaga”, con tan solo 19 años, el chico, quien acudió a este medio de comunicación con una carpeta bajo el brazo, y decenas de hojas en donde plasmó su talento, pidió el apoyo de las autoridades y casas editoriales, pues su mayor anhelo es publicar sus libros.
“Me gusta mucho escribir poesía me siento más enfocado en ese ámbito, me gusta mucho como resalta el ser humano, la belleza de las personas mediante versos, eso me llama mucho la atención y como puedes transmitir muchos sentimientos”.
Con 35 poemas, una novela concluida y una más en proceso, Daniel continuará tocando puertas para ver realizado su sueño: mostrarle al mundo lo que todas las noches llega a su mente y plasma en el papel.
La novela que concluyó se titula “La Broma de Dios”, que trata de un hombre que tiene una doble personalidad, y comete una serie de asesinatos, la historia relata, como el protagonista va descubriendo esa trama, "todo lo que hace, sin ni siquiera saber que es él realmente". Se compone de 90 páginas en trece capítulos.
Además tiene un poemario que acompañó de una subnovela, que trata de una persona que en su lecho de muerte, recuerda sus sucesos, desde que nació y lo narra en forma de poemas.
“Cuando comencé a escribir, hace tres años, no lo hice con la finalidad de lucrar con esto, yo simplemente quiero mostrar mis letras y si a alguien más le gusta lo que yo escribo es como el premio noble para mí, eso sería una gran satisfacción y es mi meta”.
En entrevista, relató, que aunque estudia docencia, tiene proyectado ingresar a la carrera de composición musical, “quiero enfocarme a las letras, es como un sueño que tengo escondido y que me gustaría verlo realizado”.
“Picasso decía que la inspiración no llega, que la inspiración lo pilla cuando está trabajando, y prácticamente así pasa, muchas veces estoy en la noche a punto de dormir, viene una idea, una frase y me pongo a escribirla, la maquilló en mi mente”.