La entrada en vigor del Impuesto Ambiental en San Luis Potosí no tendrá más prórrogas, la aplicación de este nuevo gravamen no irá más allá de junio de este mismo año.
Así lo confirmó el titular de la Secretaría General de Gobierno, José Guadalupe Torres Sánchez, quien desestimó la posibilidad de que el citado tributo estatal sea aplicado hasta el próximo año.
Recordó que el Impuesto Ambiental tendrá como contribuyentes primordiales: al aeropuerto internacional Ponciano Arriaga y a la termoeléctrica de la Comisión Federal de Electricidad; identificadas como dos de las fuentes fijas con más emanaciones contaminantes generadas al ambiente durante el desarrollo de sus procesos, en todo el estado.
El funcionario estatal dejó entrever que “lo más seguro es que los recursos captados vía recaudación de este impuesto ecológico se canalicen a proyectos y programas medioambientales como se propuso recientemente desde la iniciativa privada”.
Quedan pendientes los detalles para el cobro de ese impuesto, reconoció, sin embargo, con la elaboración del reglamento habrá más claridad con respecto a su aplicación, se despejarán inquietudes y se evitará que el tema quede sujeto a interpretaciones.
Torres Sánchez reveló que, para elaborar dichas reglas, se trabaja en reuniones con los representantes de organismos empresariales, con el objetivo de que quede integrada una legislación y reglamentación de avanzada, misma que permitirá gravar adecuadamente las actividades que contaminan el medio ambiente.
Finalmente, el encargado de la política interna en el estado indicó que la batería de ladrilleras ubicadas en el norte de la ciudad también ha sido identificada como una de las principales fuentes fijas de contaminantes, al menos para la capital potosina.
Esta misma semana, diputadas y diputados estatales aprobaron una prórroga hasta el mes de junio para la aplicación del gravamen, luego de una serie de inconformidades expresadas por sectores productivos, quienes basaron su renuencia a la nueva Ley en una reglamentación “poco clara”.