QUE SE ENFRÍE.- La historia se repite una y otra vez, cada que policías estatales o "cuicos" municipales se ven involucrados en problemas, así como postura de los jefes policiacos y de autoridades municipales, o se esconden para no dar la cara o reiteran que no se permitirá que tales actos queden impunes. Lo cierto es que es esperan a que los casos se “enfríen” y pase al olvido.
TRABAJANDO.- Es un hecho, entonces, que dentro de esa y otras corporaciones siguen trabajando los policías que, en su momento, son acusados.
CIEN DETENIDOS.- Y la respuesta de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado a los reclamos contra el jefe de la policía municipal de Ciudad Valles, Mar del Ángel, y sus secuaces, fue divulgar que los operativos de seguridad realizados en los municipios de la Zona Huasteca han dado muchos resultados. En seis días se llevó a cabo la detención de 109 personas por diversos delitos. No aclaran cuántas de ellas siguen tras las rejas.
CONVENIO.- Se firmó un convenio de colaboración para la Certificación del Sistema de Justicia Penal entre la Fiscalía General del Estado (FIGE) y el Centro de Estudios sobre la Enseñanza y el Aprendizaje del Derecho A.C. (CEEAD), para establecer las bases para que se realicen acciones de coordinación en el proceso de evaluación y certificación de competencias profesiones para las y los Agentes del Ministerio Público.
INSEGURIDAD EN LA PROGRESO.- Vecinos de la colonia Progreso denunciaron incidentes de inseguridad que ocurren en ese sector, indicando que los malvivientes que pululan en el sector ya no solamente hacen de las suyas por las noches o madrugadas, sino también a plena luz del día, como dicen que ocurrió en el cruce de la avenida Curie y la calle Mariotte, donde varios sostuvieron una riña, a la vista de todos. Y la Policía, dicen, no se apareció.
NO CONTESTAN.- Y no es de dudarse, pues las quejas se han multiplicado con los “responsables” del sistema telefónico de emergencias 911 que, de plano, ya no contestan las llamadas, y esperan a que a la ciudadanía suspenda la llamada, fastidiado por el tonito de la contestadora automática. Lo malo es que siguen cobrando sus sueldos.