Entre aplausos, porras, llanto y dolor, este miércoles fue oficiada la misa de despedida del “Bombón”, Juan José Martínez Franco chofer del camión 6001 de la ruta 9 Morales fallecido hace unos días en un accidente mientras cumplía con su ruta de transporte urbano.
El cuerpo del operador, llego alrededor de las 12:15 a la iglesia de Nuestra Señora del Rosario ubicada en la avenida Salk de la colonia Progreso, con una avanzada de dos motociclistas y en medio de un coro de claxon de vehículos, camiones urbanos y taxistas que se sumaron a darle el último adiós al amigo de todos, al ”Bombón”.
Afligidos, sus tres hijos, se dijeron honrados por el gran aprecio hacia su padre, agradecieron el apoyo, las condolencias y muestras de afecto hacia la familia, exhortaron a todos a manifestarse en vida el amor, decirse un te quiero, darse un abrazo, nunca juzgarse y nunca salir al trabajo sin decirse algo porque nunca saben si van a regresar o no”.
Al iniciar el canto de la celebración eucarística por el eterno descanso de su alma, se sumaron con su trino, las aves que anidan en la estructura de la parroquia, al fondo y durante toda la homilía no dejaron de escucharse las bocinas de taxistas y camioneros al pasar frente a la Iglesia, y en señal de luto pese a ser de rutas distintas, se sumaron al dolor de la familia con sus claxon.
“Hoy los operadores del transporte urbano están de luto, hoy parte un gran amigo, que se caracterizo por alegrar a los niños cada 30de abril vistiéndose de payaso, adornándola unidad con globos, regalando dulces a los niños, un gran hombre como pocos, amable, servicial, ejemplo a seguir, esperemos que haya más compañeros que sigan su legado”, comentó Jesús Barbosa, ex operador del transporte urbano y ex compañero de oficio del Bombón.
En tanto al interior de la Iglesia y haciendo un paréntesis al olvidar el nombre del finado, el sacerdote parroquia pidió por la resignación de familia y amigos, y citando una frase de Gandhi dijo que el mejor homenaje que puede guardarse a cualquier ser humano es imitar sus valores que cultivaron, que los consejos, el apoyo y lo que él fue, sean un legado y ejemplo a seguir.
Durante la celebración familiares, amigos y compañeros de ruta, montaron guardias de honor en torno al ataúd que desde ahora alojará el cuerpo del querido operador, uno de los momentos más sensibles fue al hacer el cambio de las guardias de honor en torno al féretro, presurosos los asistentes hacían fila para ver por última vez el ameno rostro de quien llevo alegría a propios y extraños mientras diariamente cumplía con su ruta.
“Era una persona muy alegre, le gustaba mucho su trabajo, murió haciendo lo que amaba ser, y a pesar de las complicaciones de su vida, llevaba alegría a los demás, esperemos tomar conciencia de esta experiencia y hagamos cosas más fáciles”, comento Luis Francisco Bear Salinas chofer de la ruta 13.
Un gran amigo del Bombón, luchador profesional de de la Triple AAA dijo que el Bombón fue una persona muy apreciada, “sorprendente noticia, éramos grandes amigos, cuando me tocaba trabajar aquí, si no tenia donde llegar el me alojaba en su casa, era una extraordinaria persona, cuando fallecen grandes personas te quedas en shok, como cuando supe que falleció el compañero Jesús Escoboza ‘La Parka’, todos vamos para allá”.
Previo a finalizar la misa y recibir la bendición del sacerdote, con lágrimas en los ojos, los presentes estallaron en porras y aplausos.
Contaron como de niños vivieron un sinnúmero de experiencia, la que recuerdan con más cariño es cuando al llegar de su trabajo, tomaba su “mochila de lona la vaciaba y les aventaba las monedas como su fuera bolo de bautizo”
Al salir el cuerpo, taxistas de diversas bases se sumaron también a la despedida del Bombón, en tanto que camioneros con leyendas de adiós en las ventanillas, moños negros al frente, entonaban con rostros de nostalgia y aflicción, los acordes de la canción de “Mi querido viejo” dedicada al apreciado Bombón, mientras se alejaban del lugar al igual que la carroza fúnebre con su cuerpo hacia su última morada.