El Comité en Defensa de la Vida del Altiplano Potosino, logró sentencia contra el megaoproyecto del Centro de Ingeniería del Rancho "Palula", según se dio a conocer en el Colegio de San Luis, COLSAN, donde ejidatarios afirmaron que le ganaron a la oscuridad y complicidad gubernamental.
Acompañados de Guillermo Luévano de la Clínica de Litigio Estratégico en Derechos Humanos de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, UASLP, los habitantes del municipio de Santo Domingo, confirmaron que tras varios años de lucha, obtuvieron una sentencia a favor de parte de los juzgados segundo y cuarto de distrito a nivel federal, donde se resolvieron dos amparos promovidos en contra de la instalación de un confinamiento de desechos peligrosos.
Edgar Alejandro Coronado, habitante de la comunidad de La Victoria y Secretario del Comité en Defensa por la Vida, Antonio valejo coronado, además de Mario Vázquez Vallejo, Presidente del Comité, señalaron que se prevaleció la justicia contra quienes querían construir un confinamiento de residuos industriales en la zona, sobre todo este revés se da, porque se otorgaron permisos de manera irregular.
“Nosotros seguimos en pie, somos campesinos, nosotros queremos nuestra tierra y vamos a defenderla en todos los terrenos, eso no significa que estemos libres de amenazas del maga proyecto que quieren destruirnos, que esta lucha sirva de ejemplo, que la lucha sea un ejemplo contra los demás basureros tóxicos”.
En ese lugar, se pretendía depositar anualmente dos millones de toneladas de residuos y a pesar de que la empresa interpuso un nuevo recurso, los campesinos estimaron que no prosperará dado el razonamiento que los dos jueces federales realizaron de proteger los derechos ambientales y humanos de los campesinos.
Los quejosos en todo momento recibieron acompañamiento de investigadores del Programa "Agua y sociedad" de El Colegio de San Luis, A.C., así como por el equipo legal del Centro de Derechos Humanos Samuel Ruiz A.C. y de la Clínica de Litigio Estratégico en Derechos Humanos de la UASLP.
“Ya ganamos dos amparos, pero eso no es suficiente, porque no significa que el altiplano esté libre de contaminación y amenazas a través de estos proyectos”, finalizaron argumentando que esperan contagiar a otros municipios para que no permitan la perturbación del medio ambiente a favor de los grandes empresarios del país y el mundo.
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