Aplicar en este momento un impuesto al consumo generalizado vendría a ayudar al país, en la difícil situación económica que estamos pasando, pues se tendría un mayor número de contribuyentes y por ende se generaría una mayor recaudación fiscal; además, con ello, la población vulnerable que se encuentra en la informalidad podrá tener acceso al nuevo Sistema de Pensiones que está en discusión en el Congreso de la Unión.

Así lo consideró el presidente local de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), Julio César Galindo Pérez, quien señaló que, como Sindicato Patronal, esta propuesta ya la habían presentado en otras ocasiones al Gobierno Federal, pero lamentablemente “por décadas” las autoridades la han rechazado, pues no logran entender el circulo virtuoso que se generaría en favor de la economía mexicana.

En ese sentido, explicó que en el caso de San Luis Potosí, más del 58 por ciento de la población económicamente activa se encuentra en la informalidad, que además de no contribuir en el ingreso económico de la entidad, porque no pagan impuestos, tampoco tienen acceso a algo tan básico como una Seguridad Social.

Asimismo, actualmente hay ciertos artículos, productos y servicios que están exentos del impuesto del IVA. En ese sentido dijo que, aunque incentivar el pago de impuestos al consumo en un principio sí va a reflejar un aumento en los sectores que están exentos, a la larga va a generar un círculo virtuoso de ingresos al Gobierno Federal, para hacerle frente a toda la necesidad de infraestructura, educación, pensión, etc., que tenemos en México.

“El país hoy necesita que todos los mexicanos generemos y paguemos equitativamente el impuesto al consumo, es imperante que esa gente que está en la informalidad participe, porque esto también le va a dar un beneficio a que también tenga acceso a la seguridad social, que en Coparmex hemos impulsado en la Reforma el Sistema de Pensiones”, expresó.

No obstante, apuntó, para que se pueda aplicar un impuesto al consumo generalizado, se necesita que haya una estricta rendición de cuentas y transparencia en el manejo de los recursos públicos, para que estos sean realmente destinados a los sectores y a la infraestructura que nos generará un verdadero valor agregado como país, para que no perdamos competitividad hacia el extranjero, y que siga fluyendo la inversión a México.

“La llave maestra para esto es un sistema de rendición de cuentas, de transparencia en el manejo de los recursos, para que estos se etiqueten en proyectos productivos de infraestructura carretera, educativa, hospitalaria, de investigación, y esto sea un detonante de una mejor economía”, añadió.

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