Estacionamiento, el "gran negocio" de los centros comerciales en SLP: Gallardo

La administración estatal impulsará una Ley encaminada a evitar el cobro en los estacionamientos de los centros comerciales, “es increíble que uno de los grandes negocios en estos lugares sea el pago de quienes acuden a comprar en su vehículo”.

Para el gobernador, Ricardo Gallardo Cardona, “este tema es muy importante, más ahora que se viene diciembre, por lo que vamos a tratar de que entre en vigor a partir de enero”.

Se trata de ya no cobrar en los estacionamientos, explicó, “la obligación de todo centro comercial es tener un cajón de estacionamiento para la gente que va y compra; los negocios -cualquiera que este sea, como una cafetería, una farmacia, y hasta los oxxos- se comprometen, porque así lo pide la Ley urbana, que para poder abrir cuenten con un cajón de estacionamiento”.

“Si no paramos esto, de rato hasta los oxxos van a tener ahí afuera su plumita para que entres al estacionamiento y ahora si van a abrir la segunda caja para cobrarte”, ironizó.

Aarón Cadena | El Sol de San Luis

“Necesitamos parar esto, es increíble que uno de los grandes negocios de estos centros comerciales sea el estacionamiento, es una fuente de financiamiento muy grande, porque no nada más se les paga el dinero de lo que consumes dentro de las tiendas y de las plazas, sino también el boleto de estacionamiento”.

El mandatario estatal reiteró que es por Ley que tienen que contar y ofrecer esos espacios “por eso vamos a impulsar muy fuerte esa reforma, para que esté lista y a partir de enero del próximo año ya no se pague este servicio”.

Finalmente, Gallardo Cardona insistió en que será una reforma legal muy importante, encaminada a todos los negocios, principalmente centros y plazas comerciales.

Recientemente las quejas en contra de estos lugares se ha incrementado, pues además del cobro del espacio por parte del establecimiento, en estos lugares se encuentran los tradicionales “viene, viene” que presionan a los clientes para lavar el carro, o mínimo “le echen un ojo”, con la consecuente propina.