Es un error humanizar a las mascotas, indicó, Margarita Pizzuto, Fundadora de la Estancia para el Perro Abandonado Santa Martha; “una cosa es que llenen espacios de soledad y otra que los consideres hijos”, remarcó.
Actualmente, los mexicanos han adquirido la costumbre de adoptar perros o gatos y tratarlos como si fueran sus verdaderos hijos. Tener “perrhijos” o “gathijos”, se ha convertido en el nuevo modelo de familia en el país.
Expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México, consideran que llevar a cabo prácticas como gastar más dinero en el perro que en uno mismo, comprarle ropa “humanoide”, publicar fotografías en redes sociales del animal, llamarlo “mi bebé” y otras actitudes parecidas, podrían ser señales, de que el dueño padece algún tipo de trastorno psicológico.
Al respecto, Margarita Pizzuto, indicó que es ilógico ver a los animales como seres humanos, pues remarcó, las especies deben ser respetadas, tratadas como lo que son y ofréceles el hábitat que le corresponde.
“Es ilógico tratarlos (animales) como humanos, no se debe de hacer, aunque tu perro se duerma en tu cama, el perro tiene que salir y estar abierto, y sacarlo a pasear y que conviva con otros perros, es como si a ti te tratan de otra manera, en algún momento lo vas a resentir, somos amantes de los perros, pero creo que humanizar a los perros no es correcto”.
Independientemente del cariño y la compañía que te regale una mascota, reiteró, “los animales tienen que ser respetados como especie, hay que respetar al perro como perro, y al humano como humano”.
“Si nosotros humanizamos a los perros no está muy bien, yo comprendo y estoy totalmente de acuerdo de que el perro te llena muchos espacios de soledad, y que muchísimas personas gracias a un perro viven una vida más feliz, pero eso no tiene nada que ver con que los consideres hijos, el perro debe ser tratado como un perro, porque el perro exige su respeto como especie”.