En lo que se calificó como un acto de justicia laboral, el Ayuntamiento capitalino entregó pensiones a trabajadores que desde hace tiempo aguardaban ese derecho, algunos con más de 50 años de servicio, y viudas que desde mucho tiempo atrás habían tramitado ese beneficio sin conseguirlo.
A la par, se hizo a todos un reconocimiento por los años dedicados a trabajar por la ciudad y sus habitantes; el jubilado con mayor tiempo en labores es Fernando Soto Aguilera, del Rastro municipal, con 56 años activo.
Se reconoció que muchas jubilaciones, incluyendo pensiones por viudez, se frenaron por cuestiones burocráticas, políticas o de corrupción.
El alcalde capitalino Enrique Francisco Galindo Ceballos, dijo que era necesario este acto de justicia laboral; y que pudo ser posible gracias al buen manejo de las finanzas municipales.
Previamente, las y los regidores habían aprobado de manera unánime que se entregaran esas jubilaciones y pensiones.
En su mensaje, el Presidente Municipal les dijo que no es una despedida sino un cambio de estatus, y les pidió seguir queriendo a la ciudad.
El alcalde y la Presidenta del DIF Municipal, Estela Arriaga Márquez, entregaron personalmente, mesa por mesa, el reconocimiento a la trayectoria y el abrazo fraternal a las y los trabajadores del Ayuntamiento que desde este 1 de febrero se separan del servicio público municipal.