Es preocupante que productores del campo finalmente “malbaraten” sus terrenos, ante la imposibilidad de ponerlos a trabajar.
Así lo reconoció el representante de la Sociedad de Riego Agrícola de Villa de Reyes, Pedro Jesús Grimaldo Aispuro, quien admitió que dicha situación se ha convertido en un problema recurrente y “delicado”.
Culpó a la falta de apoyos, como la reciente suspensión al permiso de rebombeo ordenado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), “porque precisamente este tipo de apoyos, al dejar de recibirlos y que se les niegue a los campesinos el derecho al agua, está obligando a que se busque esa salida de malbaratar, de vender y abandonar el campo”.
Hay que ser sinceros, expresó, “el campo es el sustento de la casa chica, por así decirlo, es el sostén del estado”.
Urgió a las autoridades a que se les brinde el apoyo que necesitan así como a atender sus requerimientos, para evitar que el campo deje de producir y que finalmente ejidatarios, campesinos y productores se deshagan de sus tierras.
Darnos lo que requerimos, dijo, “para impedir que se les están abriendo las puertas a estas personas, empresarios que se dedican al negocio inmobiliario, porque hay muchos que están aprovechando este asunto para comprar hectáreas completas, lotificar y hacer casas, eso no debería ser así”.
Le pedimos a los directivos de la SADER, reiteró, así como al gobernador del estado, “que nos apoyen, que no nos dejen solos y nos abandonen la gente del campo es México, esta generación es el hoy y el futuro de nuestro país”.
Finalmente, Grimaldo Aispuro advirtió que no hay que olvidar el fondo del asunto, “y es que en su mayoría se trata de tierras ejidales, que provienen de un movimiento muy grande que fue nuestra Revolución Mexicana, por lo que a nosotros, así como a los jóvenes de la nueva generación, nos corresponde seguir defendiendo la tierra, seguir en este movimiento revolucionario y no abandonar el campo”.
