En México, 18 millones 248 mil 966 habitantes son adultos mayores de 60 años, de los cuales poco más de seis millones son parte de la Población Económicamente Activa (PEA) y solamente 68 mil 938 están desocupados.
De la población ocupada de adultos mayores, 75.2 por ciento lo hace desde la informalidad laboral y se ocupan como trabajadores independientes en actividades agrícolas, ganaderas, artesanales, silvícolas, de caza y pesca, industriales, comerciantes y ayudantes.
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Ante este escenario, el presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH), Héctor Márquez Pitol advierte que es poco viable fijar un porcentaje para la contratación de personas mayores de 60 años de 5 por ciento dentro de la plantilla laboral.
Porque dentro de la PEA, únicamente 68 mil 938 personas mayores tienen disponibilidad para laborar, es decir poco más del 1 por ciento están en posibilidad de buscar una oportunidad de trabajo.
Destacó que debido al incremento de la población de más de 60 años, el Senado de la República, aprobó en lo general y lo particular en la Ley Federal del Trabajo (LFT), que las empresas con más de 20 trabajadores, tengan plantillas laborales con al menos 5 por ciento de personas mayores.
Esto significó modificar los artículos 132 y 133 de la LFT, de manera que se ajusta a una persona adulta mayor por cada veinte trabajadores.
“Este tipo de políticas que se discuten, tienen un impacto positivo para cerrar las brechas que nos separan del empleo digno y formal. Sin embargo, no siempre resultan factibles, ya que el reto implica encontrar la disponibilidad suficiente para que las empresas puedan cumplir con el porcentaje que dicta la reforma a la Ley Federal del Trabajo”, dijo Márquez Pitol.
También señaló que los adultos mayores de 60 años, pueden ser personas muy productivas, ya que cuentan con suficiente experiencia, conocimiento y capacidad para la toma de decisiones.
Además, pueden dirigir un equipo o generar la estrategia para el logro de los resultados deseados.
Empero, también es un grupo de la población que resulta “más caro”, por lo que los empleadores optan por ocupar trabajadores con menor experiencia, por sueldos más bajos.
Destacó que de acuerdo al INEGI, de los 18.2 millones de personas adultas mayores que representan el 14.2 por ciento de la población total, 6 millones 026 mil 881 pertenecen a la Población Económicamente Activa (PEA) y 12 millones 222 mil 085 personas a la Población No Económicamente Activa (PNEA).
De la PEA, cinco millones 957 mil 943 adultos mayores están ocupados. Sólo 68 mil 938 no tienen ocupación y en posibilidad de buscar una oportunidad de trabajo y de la población ocupada, el 75.2 por ciento lo hacen en la informalidad; el 24.8 por ciento en la formalidad y 49.4 por ciento está asegurados en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
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Comentó el presidente de la AMECH, “que otra clasificación que destaca sobre la población ocupada es que tres millones 441 mil 421 adultos mayores son trabajadores independientes y dos millones 516 mil 522 son subordinados remunerados”.
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