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Aunque el británico John Ryder aguantó los 12 rounds, el mexicano Saúl Canelo Álvarez fue más contundente para ganar esta noche por decisión unánime de los jueces en el estadio Akron, acompañado por miles de sus fans en su tierra natal, Guadalajara.
Tras los 12 rounds de la pelea estelar de la función denominada "El Rey viene a casa", los jueces le dieron el triunfo a Álvarez con las siguientes tarjetas: 120-107, 118-109 y 118-109. Así, Canelo conservó el título de campeón mundial de los supermedianos; ahora suma 63 peleas: 59 triunfos (39 por nocaut), dos derrotas y dos empates.
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El mexicano dominó gran parte de la pelea, pero nunca pudo finiquitar al británico que mostró fortaleza a la hora de enfrentar al mejor libra por libra del boxeo mundial.
Habrá que decir que el mexicano no soltó la mano izquierda como en otras ocasiones, luego de venir de una intervención en octubre pasado tras la trilogía con Gennady Golovkin. Justo con esa mano era con la que últimamente definía sus combates, pero esta vez no tuvo la frecuencia de golpeo con la izquierda.
Ambos peleadores aprovecharon el primer capítulo como auténtico round de estudio. Sin destellos sobre el ring, lució algo mejor el mexicano.
El segundo episodio quedó marcado por el gancho al hígado de Canelo a Ryder y por un choque de cabezas que dejó una leve herida en la ceja derecha del campeón.
Ryder comenzó el tercer round bañado en su propia sangre por una intensa hemorragia nasal, testimonio de los golpes de Saúl Álvarez.
En el cuarto asalto, el mexicano ya se veía dominante, trabajando la pelea con jabs y rectos de izquierda y derecha.
La afición estalló en el estadio cuando el campeón azteca mandó a la lona a Ryder con una combinación a la cabeza, primero un jab y luego un recto de derecha. El Gorila reaccionó positivamente ante la cuenta de protección del réferi.
Visiblemente agobiado y con esfuerzo para mantenerse de pie, Ryder alcanzó a conectar un upper en la cabeza del mexicano que siguió avante en el sexto round.
Con la guardia prácticamente impenetrable y asestándole golpes al retador, Canelo Álvarez se llevó también el séptimo capítulo.
En el octavo, la imagen de Ryder era más dramática con el rostro ensangrentado y recibiendo la derecha y la izquierda de Canelo por igual. A punto de que terminara el episodio, el británico cayó a la lona, pero esta vez a causa de un tropezón.
Ryder llegó al noveno asalto, pero sin hacerle daño a Saúl Álvarez. La mano derecha del mexicano se volvió un auténtico suplicio para la cabeza del británico que tambaleó, pero se mantuvo de pie.
En un intento de conectar algún golpe de suerte en el Canelo, en el décimo round El Gorila quedaba desprotegido, sin guardia, y recibía tremendos golpes a la cabeza.
La agonía de Ryder se prolongó al undécimo round, donde sólo se dedicó a resistir para llegar al límite del combate.
Llegó el duodécimo y último round. Álvarez terminó con pocas huellas de la batalla en el rostro y Ryder logró mantenerse de pie hasta escuchar la última campanada.
"Ryder es un peleador muy duro y muy difícil, lo respeto mucho", dijo Álvarez tras ganar la pelea celebrada en el marco de los 200 años de la fundación de su natal estado de Jalisco. "Es un momento histórico para mí, soy bendecido por estar aquí con mi gente, que me han apoyado desde el principio".
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