Vaya usted a saber si sean los vientos de Asia, delEmirato o las arenas de sus dunas…
Lo cierto es que Óscar Pérez se declara en impecablescondiciones para un desafío más en su carrera.
Este sábado, el ‘Conejo’ debutará en untorneo que le faltaba a su trayectoria: Mundial de Clubes.
Y lo hace en estupendas condiciones diá con día.
“No me duele nada, absolutamente nada”, le dice aESTO en exclusiva, con tono de confesión.
“Hace un año tenía un dolor en la rodilla;ahora no queda ni rastro de eso, me siento muy bien”,reiteró al Diario de los Deportistas.
A la orden para otro brinco.
¿El último? No lo parece…
TODAVÍA NO
Instalado en lujoso hotel de Abu Dhabi, los Tuzos cuentan lashoras que faltan para medirse al Wydad Casablanca de Marruecos.
Los más jóvenes lucen nerviosos.
No es el caso del arquero, quien se da tiempo para tomar uncargado café árabe.
Incluso pasea por el museo de joyas que guarda en su interiororo y otras piedras preciosas.
La referencia es inmediata pero Óscar ataja de primeraintención.
“Ya me quieren ver como reliquia pero todavía no,todavía no”, dice al tiempo que guiñe un ojo parala lente.
La decisión sobre su futuro sigue pendiente. Por ahorano.
PRIMER PASO
Con la misma serenidad, el ‘Conejo’ aguarda elmomento de entrar en acción.
“Nos espera un encuentro muy duro; siempre pasa en estetipo de competencias tan cortas; sin embargo, hemos tenido unafuerte preparación, entrenando a conciencia para ganar estejuego tan crucial en nuestras aspiraciones”, afirma concafé en mano.
Y si en alguien se puede confiar, hay que poner sus guantespor delante.
“Tenemos que entrar muy concentrados, esa es la clave;después, hacer lo que sabemos porque el objetivo es dar esepaso; el primero si queremos trascender”, explica desdeEmiratos Árabes Unidos el “Conejo”Pérez.