Diez años después, terminó la carrera de Mark Sánchez en la NFL.
El quarterback de origen mexicano puso punto final a su trayectoria dentro de los emparrillados, para dar paso a su andar como analista de una importante cadena de televisión.
El egresado de la Universidad de USC, seleccionado en la quinta ronda del Draft del 2009, tuvo una carrera de muchos altibajos. Mark fue adquirido en primera instancia por los Cafés de Cleveland, pero los Jets hicieron todo lo necesario, inclusive hipotecaron su futuro, para que arribara a Nueva York y liderara una franquicia en pleno reestructura.
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También fue el primer año de Rex Ryan como entrenador en jefe y de una defensiva imponente. Esos Jets, con Sánchez en los controles, llegaron hasta la final de la Conferencia Americana y se quedaron a un paso del Super Bowl. Mismo que repitieron el año siguiente. Sus dos primeras campañas en la NFL fueron espectaculares, respondiendo en los momentos clave y sobre todo en los playoffs, dando más de una campanada.
Pero su desempeño fue cayendo y con ello, de firmar un contrato de 50 millones de dólares, pasó a perder su puesto como titular y miembro de los neoyorquinos. Tuvo dos campañas con marca negativa, que provocaron que saliera rumbo a Filadelfia en el 2014. Ni llegó a ser titular con las Águilas de Filadelfia, jugando apenas 10 partidos de los cuales perdió seis.
Siguió recorriendo equipos de la NFC Este, con un breve paso por los Vaqueros de Dallas y el último con Pieles Rojas. Jamás retomó la versión que lo llevó a las puertas del Super Bowl en sus inicios dentro de la NFL.
Tras un receso de temporadas donde ninguna de las 32 franquicias se mostró interesada con sus servicios, Mark Sánchez optó por terminar su carrera de una década en los emparrillados y pasar a otra faceta, todavía ligado al futbol americano.
En total, disputó un total de 79 partidos, seis de ellos de playoffs, con marca de 41 victorias y 38 derrotas. Lanzó para 15,357 yardas aéreas, con 95 pases de anotación y 89 intercepciones.
ORGULLOSO DE SUS RAÍCES
Mark Sánchez nunca escondió su origen.
El pasador siempre se mostró orgulloso de sus raíces mexicanas –su bisabuelo Nicholas Sánchez, nació en Zacatecas-, y desde que arribó a la NFL los medios siguieron muy de cerca su desempeño.
Aunque en un principio su español no era fluido, con el pasar de los años lo fue mejorando para llegarle de mejor forma a la gran fanaticada que acumuló en México. Inclusive se pronunció como un fiel seguidor de la Selección Nacional.
“Tengo un jersey con el número 6 de Gerardo Torrado. Es el número que utilizo con los Jets. Realmente respeto mucho a los futbolistas, son grandes atletas. No sé si yo podría estar corriendo durante 90 minutos, es algo muy divertido”, comentó en su época con los neoyorquinos.
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