Cuatro de las presas que abastecen a la zona metropolitana han tenido un desfogue controlado en estos días para evitar riesgos a la población y sus estructuras, informó Armando Rocha Hernández, jefe del Centro de Previsión Meteorológica de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Actualmente la presa San José se encuentra al 95% de su capacidad, El Peaje está al 60%, El Potosino al 97.7%, Cañada del Lobo al 52.2%, y El Realito al 101.4%, por lo que se ha iniciado el desfogue en cuatro de ellas para evitar riesgos a la población, ya que los meses de septiembre y octubre se consideran el punto máximo de la temporada de lluvias.
Al respecto, el jefe del Centro de Previsión Meteorológica explicó que cada presa cuenta con políticas de operación en las que se señala los niveles de seguridad en almacenamiento para evitar poner en riesgo su estructura, por lo que por ejemplo, “en el caso de la presa San José y El Potosino no es conveniente tenerlas arriba del 90%” de su capacidad.
En el caso de la presa Cañada del Lobo lo ideal es tenerla al 50% de su capacidad, pues recordó que esta es una presa de control de avenidas, no de almacenamiento, por lo que “ya tiene 15 días vertiendo, pero es un volumen por obra de toma controlado para que no suba el nivel”.
Explicó que a pesar de que hay personas que creen que este embalse es para abastecer al sector agrícola, en realidad sólo es de control de avenidas, sin embargo cuando se hace desfogue se entrega agua a los agricultores de San Juan de Guadalupe para sacarle provecho al recurso, “sería un crimen tirarla”.
Además de estas tres presas, también se ha desfogado El Realito, que se encuentra por arriba del 100% de su capacidad de almacenamiento.
En base a estas condiciones, dijo considerar que después de los meses de estiaje que atravesó San Luis Potosí, “no vamos a tener problemas de abastecimiento de agua, ni para la agricultura ni para la población”, pues la temporada invernal también trae consigo algunas precipitaciones.