En San Luis Potosí, las autoridades de salud, reconocieron que entre uno de los 31 infectados por Coronavirus se encuentra una madre lactante, lo que coloca en vulnerabilidad al recién nacido, es por eso que el Instituto Mexicano del Seguro Social, IMSS, está recomendando a este sector extremar cuidados.
Sobre todo porque nos encontramos en la Fase II del COVID-19, donde las madres lactantes y cuidadores, deben fortalecer las medidas de higiene y aislamiento para evitar contagios por este virus.
En seguimiento a la Jornada de Sana Distancia, es importante señalar que el recién nacido y la mamá no deben recibir visitas en casa; evitar besarlos en la cara, manos y boca. Entre menos expuestos estén con otras personas, disminuye el riesgo de infección.
En cada cambio de pañal, se debe realizar un aseo general al recién nacido, únicamente con agua tibia, con especial énfasis en la cara y las manos, ya que el jabón puede lesionar su piel.
Se pidió a los padres de familia y cuidadores de los recién nacidos, seguir las recomendaciones que emite el IMSS y el sector salud. En este sentido, en el primer mes de vida no es conveniente sacar de su casa al menor.
Es responsabilidad del pediatra determinar las especificaciones en cuanto a la alimentación así como el seguimiento médico que deben llevar. En caso de alguna urgencia es necesario llevar al recién nacido a la Unidad de Medicina Familiar u hospital para recibir atención especializada.
En el caso de que la mamá resulte positiva por Coronavirus, médicos especialistas deberán practicarle una prueba también al pequeño y su evaluación será en función a que tenga o no datos clínicos de la enfermedad.
Si la madre lactante presenta alguna infección leve y el médico prescribe que puede estar en su casa, lo hará bajo los siguientes cuidados: usar el cabello recogido, lavar las manos frecuentemente mediante la técnica cinco de cinco (mojar, enjabonar, frotar, enjuagar y secar), usar protección en nariz y boca para no contaminar al bebé e higienizar los senos para amamantar al recién nacido.
En caso de que la madre no pueda hacerse cargo de su hijo, el o la cuidadora, deberán seguir todas las medidas de higiene como lavado de manos, toser y estornudar en el ángulo interno del brazo, no saludar de beso o mano y, sobre todo, no tocarse la cara.