Sin fortuna Fermín Rivera en presentación en la Plaza México

En sus dos astados hubo silencio para el matador de toros potosino que no pudo cuajar una buena faena.

Roberto Mirabal | El Sol de San Luis

  · lunes 21 de febrero de 2022

En su primera salida Fermín Rivera estuvo voluntarioso, pero nunca embistió el toro a su llamado. / Cortesía La Plaza México.

Una tarde gris tuvo el diestro potosino Fermín Rivera en su regreso a los ruedos, en la última corrida de la Feria de Aniversario 75-76 de la Plaza México, en la que en sus dos salidas al ruedo hubo silencio.

La fortuna en el sorteo previo no le favoreció al matador de toros ya que del lote de Barralva, los dos astados que le tocó lidiar fueron los peores de la corrida, no embistiendo y haciendo que pasara las de caín al no poder ni siquiera cuajar un buen capotazo o muletazo y para terminar con esa pobre presentación, al entrar a matar Rivera Agüero no estuvo certero, algo que le caracteriza.

El primer toro que le tocó lidiar fue "Carloto" de 522 kilos, negro, largo, enmorrillado, tocado del pitón izquierdo con cornamenta desigual, siendo el segundo de la tarde, mismo que desde que salió al ruedo hizo batallar a Fermín y toda su cuadrilla en los tres tercios de la lidia, pues su embestida era bruta y brusca, siempre deslucido y que no se empleaba cuando el torero se lo pedía con el capote o muleta.

Cortesía | La Plaza México.

En ese mismo el picador Gabriel Meléndez tuvo caída del caballo en el primer puyazo que intentó dar, por lo que Carlos Domínguez el segundo picador tuvo que entrar al quite y esto fue reprochado por los asistentes que hicieron una buena entrada al coso más grande del mundo. En las banderillas pasó lo mismo, sufrieron para clavarlas Luis Alcántar y Pascual Navarro. Y ya en el tercer tercio, sin brindis, el toro fue todavía a menos, con un mal estilo, cara abajo y sin casta, no perseguía la muleta de Fermín y en la suerte suprema el potosino pinchó en par de veces hasta la tercera con estocada trasera y caída pudo darle fin.

De igual manera fue "Cardiofresco" de 589 kilos, su segundo toro y sexto de la tarde, un ejemplar español largo con mucho pecho, pesado, enmorrillado y fuerte, negro y que en ninguno de los tercios embestía, muy incierto en su andar, se frenaba y se rajaba al encuentro con el torero, hasta tumbó de su caballo al picador. Así pasaron los minutos sin poder hacer nada, Fermín Rivera nunca pudo conectar con el público, ni mostrar su arte clásico, por lo que de estocada trasera acabó con el astado ante la indiferencia del respetable.

El matador de toros potosino tuvo silencio también en su segundo ejemplar, en gris actuación. / Cortesía La Plaza México.

EL DATO

Fermín Rivera tendrá su siguiente presentación el sábado 19 de marzo en Lagos de Moreno en un Festival Taurino.