Magistral concierto ofreció la Orquesta Sinfónica de SLP

Por enésima vez demostró su grandiosa limpieza en la técnica musical bajo la batuta del Maestro José Miramontes Zapata

Angélica Maldonado | El Sol de San Luis

  · martes 26 de diciembre de 2023

Angélica Maldonado | El Sol de San Luis

Un magistral y fascinante concierto ofreció la Orquesta Sinfónica de San Luis Potosí, bajo la dirección general y artística de su fundador, el Maestro José Miramontes Zapata en el arquitectónico Teatro de "La Paz" .

El programa que se ofreció y que dejó embelesado al respetable, fue el siguiente

PROGRAMA:

SERGUÉI RAJMANINOV

SINFONIA NO. 2 EN MI MENOR , OP. 27

I. Largo – Allegro moderato,

II. Allegro molto,

III. Adagio,

IV. Allegro vivace,

(duración aproximada 64’).

Dirigió el concierto en el Coloso de Villerías, el Maestro José Miramontes Zapata, y respecto al concierto explicó a este periódico "El Sol de San Luis"

"Esta epopéyica sinfonía es múltiplemente icónica por varias razones". "La primera por ser la autoría de un ícono de la composición rusa de finales del siglo XIX y casi toda la primera mitad del XX, hasta el momento de su muerte en 1943, bajo la ansiedad del deseo de retornar a su amada Rusia".

Angélica Maldonado | El Sol de San Luis

"Las razones que bordean lo icónico segundo y lo subsiguiente; tienen que ver con el trato de las representaciones figurativo musicales, que como íconos retablitos en mosaico bizantino ortodoxo se van sucediendo los unos a los otros: de la figuración obscura inicial, del obscuro presagio coalisional entre las fuerzas del bien y el mal, Dios y el demonio, se suceden las sagradas imágenes celestiales, las escenas épicas de la lucha de San Jorge contra el dragón representativo del mal, el agradecimiento por la vida, la fuerza inagotable para continuar en la lucha frente al mal".

"El momento culminante del entusiasmo por vencer al mal se nos presenta en la segunda parte de la sinfonía: fantástico manejo del color y brillo de la paleta orquestal. En un ambiente pleno de confianza en la victoria de lo divino sobre lo demoniaco, el texto musical contagia con su inagotable impulso hacia la victoria del bien".

"Uno de los centros lírico, poético y religioso más importantes de la literatura musical universal, se nos presenta en la tercera parte de la sinfonía. La evolución de lo musical hacia el centro de concentración dramatúrgica se nos muestra como una constante sin descanso, como inagotable recurso de alguien que está convencido de agradecer a Dios sin reparos por todos los bienes que ante la vida se le presentan como regalo divino".

Angélica Maldonado | El Sol de San Luis

"En la cuarta parte Rajmaninov cierra el ciclo de la sinfonía con una celestial celebración por la derrota del mal, pletórica de alegría sin igual, con dificultades técnico artísticas que seguramente en el ámbito celestial no se está exento. El aire triunfal de la coda reafirma todo el discurso de esta parte, no dejando lugar a dudas acerca de hacia dónde se inclinó la balanza".

"La dedicación que Serguéi Rajmaninov brindó a Serguéi Tanéyev, expresa la humildad de reconocimiento a la figura, que además de excelente compositor, descubrió las leyes que rigen el Contrapunto Móvil, Vertical, Horizontal y en todas sus variables, gracias a lo cual podemos elucidar acerca de estas leyes y explicarnos la obra de J. S. Bach, y todos los grandes polifonistas universales".

"Escrita entre 1906 y 1907, al tiempo que «la Isla de los Muertos», la sinfonía fue estrenada el 8 de febrero de 1908 en San Petersburgo, bajo la dirección del propio compositor".

Así lo explicó el Maestro José Miramontes Zapata en exclusiva para "El Sol de San Luis".

Angélica Maldonado | El Sol de San Luis