La ola de ataques al transporte férreo es ya imparable; la madrugada de ayer los asaltatrenes descarrilaron otra máquina y al menos tres vagones más cuando se trasladaba a Veracruz.
Las pérdidas podrían ser millonarias al haberse salido las tolvas de los rieles, los cuales al parecer se torcieron y los durmientes quedaron destruidos en un tramo de aproximadamente 100 metros.
Este es el quinto ataque de severas consecuencias en contra de la empresa Ferrosur, en lo que parece ser ya una guerra imparable de parte de los saqueadores, quienes sin medir consecuencias sabotean las vías.
Afortunadamente, a la fecha no se han registrado lesionados o pérdidas humanas que lamentar.
El suceso reciente ocurrió ayer en la madrugada, cuando la máquina 4705, remolcaba varios vagones en la ruta Puebla-Veracruz.
Como en los descarrilamientos anteriores, en esta ocasión los delincuentes destornillaron la placa contrarriel y provocaron que al paso del convoy las vías se abrieran.
Inevitablemente los vagones que iban atrás de la locomotora descarrilaron y quedaron volcados en la terracería, por lo que se frenó el avance de los demás contenedores.