DELICIAS. Luego de reconocer que a los agricultores les fue de “regular para arriba” en su reciente visita a la Ciudad de México, el dirigente de la Asociación de Unidades de Riego del Estado de Chihuahua (Aurech), Salvador Alcántar, matizó el conflicto por el agua con gobierno federal con un: “Estamos en la pelea”.
Ayer se llevó al cabo la reunión pacífica de cientos de agricultores en el gran estadio de Delicias, donde trataron de hacer notar que el conflicto por el agua de las presas de la región centro sur es de todos, no sólo de los agricultores.
Un grupo de mujeres convocó a la población de cinco municipios de la región para estar presentes y manifestarse pacíficamente, y con sana distancia, a fin de enviarle un mensaje al presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, de que si insiste en llevarse el agua de las contenedoras Madero, y ahora Boquilla, va a generar un problema social grave.
La gente de la región, unos 200 mil habitantes, vive de un 90 por ciento de la actividad económica que arroja la producción agrícola, cuyo Producto Interno Bruto se calcula en 20 mil millones de pesos que se trabaja en los campos agrícolas de los distritos de riego 005 de Delicias y 113 de Camargo, pero que incluye unos 12 municipios de la región centro sur del estado de Chihuahua.
Hace unos días Alcántar Ortega acudió a la capital del país con una decena de agricultores. Informó que no pudieron hablar con el Presidente de México, ni tampoco los recibió Marcelo Ebrard, el canciller, a quien habían solicitado su intervención para que se diera una reunión con la Comisión Internacional de Aguas y Limites (CILA).
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