“Ya casi no compran el kilo completo, se llevan apenas uno o dos jitomates sueltos”, se queja un vendedor del mercado “Miguel Hidalgo”, ante la constante variación del precio ese vegetal.
Este fin de semana, el kilogramo de jitomate tipo saladettte de primera calidad varió entre los 30 y 35 pesos y a veces más, según un recorrido por fruterías de los mercados “Miguel Hidalgo”, “República” y “Revolución”.
Sin embargo, una semana antes el kilo de ese vegetal estaba entre 20 y 25 pesos. “Es a veinte pesos su precio normal, de casi todo el año pasado, pero su precio varía porque a veces nos lo traen de Jalisco, cuando aquí (en la Zona Media) está escaso”, explica un locatario del mercado “Revolución”.
Coincide en que los compradores ya no se llevan los kilos completos, piden medios kilos, cuartos o, de plano, se llevan uno a dos jitomates sueltos. “Uno así de chiquito te cuesta 2.50 o 3 pesos”, ejemplifica con uno del tamaño de una pelota de tenis.
Sin embargo, en las semanas previas a Semana Mayor, los precios de la cebolla también sufren variaciones a la alza, al igual que el aguacate, aunque “son productos que todo el año se están moviendo, no tienen un precio estable”.
Ahorita, el kilo de cebolla se coloca entre los 10 y 11.50 pesos el kilogramo, muy por debajo de su precio normal, que es entre 18 y 20 pesos; no obstante, el mes pasado llegó hasta los 30 pesos.
Los vendedores de frutas y legumbres atribuyen la variación de precios a los cambios de clima en los últimos meses, principalmente el frío, que “quema” los cultivos y se cosechan cantidades menores a las proyectadas, y para satisfacer la demanda en ocasión se debe traer el producto de entidades diferentes.