La Huasteca Norte cuenta con gran número de cuerpos de agua, como también de un clima de altas precipitaciones pluviales, estos dos elementos forman el hábitat idóneo para la presencia del mosquito Anopheles, transmisor del parásito plasmoduim que provoca el paludismo o malaria; por ello los Servicios de Salud de San Luis Potosí mantienen acciones antivectoriales y una estrecha vigilancia epidemiológica, por lo que aseguran que hasta el momento que no hay casos registrados de dicha enfermedad en la región.
El doctor Francisco Adrián Castillo Morales, Jefe de la Jurisdicción Sanitaria número 5, señaló que el paludismo forma parte de las enfermedades transmitidas por vector, por lo que se realizan acciones continuas de vigilancia epidemiológica de este mosquito, que a diferencia del aedes aegypti, tiene presencia en cualquier cuerpo de agua como ríos, lagos y lagunas.
Castillo Morales indicó que “En la Huasteca nos encontramos rodeados por cuerpos naturales de agua, y situaciones climáticas de lluvias intensas, y son las condiciones idóneas para el hábitat del Anopheles, es por esto que mantenemos las acciones de vigilancia y control vectorial del mosquito; en donde tenemos 2 años sin la presencia de casos sospechosos ni confirmados del parásito del Paludismo o malaria”. Como parte de las acciones de vigilancia se comprende la búsqueda intencionada de casos en habitantes, que se encuentren cercanos a los cuerpos de agua, mediante el tamizaje de sangre llamada “gota gruesa”; por ello de enero a septiembre se han analizado cerca de 3 mil pruebas, resultando negativas en su totalidad.