Alrededor de 14 hectáreas de flor de cempasúchil, nube y mano de león serán cortadas a partir de hoy, y la mayoría será enviada a los estados de Nuevo León y Tamaulipas para su comercialización, muy poca se queda para los consumidores locales.
La lateral de la carretera a Matehuala, así como algunas calles del primer cuadro de la ciudad como Blas Escontría, Negrete y San Pedro, destacan por su color amarillo, el color del luto, conocida también por “la flor de veinte pétalos” en la antigüedad.
Según los pueblos originarios esta planta representaba a los rayos del sol, era esa luz que alumbraba a los muertos en el lúgubre mundo de los muertos. Actualmente la importancia del cempasúchil no ha desaparecido.
Muestra de ello es que en este municipio se realizó por primera vez, un acto simbólico para iniciar el corte de esta flor, denominado evento “Cosechando tradiciones”, en donde el alcalde Gilberto Hernández Villafuerte, realizó el primer corte.
El Jefe de la comuna, dirigió un mensaje en el que resaltó la labor de las familias que se dedican a esta noble actividad, con lo que reconoce el trabajo de quienes cultivan el campo soledense.
Por su parte, el productor Miguel Ramírez, agradeció la presencia de las autoridades municipales en su parcela y detalló parte de la actividad que desarrolla junto con su familia desde hace más de 20 años, cuya flor comercializa en otros estados de la República Mexicana.
Se dice que las flores de cempasúchil son las encargadas de marcarle el camino a los difuntos cuando regresan la tierra de los vivos, Y es por eso que cada Día de Muertos llenan los panteones de todo el país, con esta emblemática flor.