El cambio de administración no obligará a la administración a un despido de personal sindicalizado, todos seguirán conservando su empleo y asegurados sus derechos laborales.
Así lo informó el oficial mayor, Noé Lara Enríquez, al precisar que si bien el compromiso es hasta el 30 de septiembre, cuando concluye la actual gestión y aunque puede haber algunos ajustes o movimientos, siempre habrá un estricto apego legal para no vulnerar los derechos laborales.
"Los movimientos que pudieran darse no nos corresponden, pero la contadora Leonor Noyola, la alcaldesa electa, es una persona consciente, ella ha formado parte de estas administraciones y sabe perfectamente que el capital humano es lo más importante que tenemos, puesto que sin ellos difícilmente podríamos avanzar con la consecución de los objetivos", declaró.
Por ello, insistió en que los trabajadores deben de estar tranquilos, "no hay ningún problema, seguirán laborando de manera normal sin ninguna dificultad", abundó.
Por otro lado, dijo que a quienes se les contrató por honorarios, "desde luego no tienen derecho a las prestaciones que les competen a los trabajadores y tampoco generan antigüedad ni ningún otro tipo de derecho, más que el pago del honorario por el servicio que están prestando", aclaró.
No obstante, también se les respetan sus contratos y todo lo que se realice en este sentido será siempre apegado a la legalidad, insistió el Oficial Mayor, al recordar que hay alrededor de 900 trabajadores, entre sindicalizados y de confianza, y aproximadamente 350 a 400 personas bajo el régimen de honorarios profesionales, en cuanto a éstos últimos, la siguiente administración determinará si decide continuar solicitando la prestación de sus servicios o rescindir sus contratos, con apego a la Ley.