San Luis Potosí es de los estados que menos recursos destina a la burocracia, pues de los 50 mil 620 millones de pesos (mdp) que se gastaron durante el ejercicio de 2019, tan sólo 8 mil 614.9 millones de pesos se asignaron para la compra de bienes y servicios necesarios para ejecutar las funciones de gobierno de manera satisfactoria.
De acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), a nivel nacional existen diferencias generalizadas en cuanto al manejo de los recursos públicos asignados al gasto administrativo o burocrático de las administraciones estatales; en los últimos cinco años, se registró un crecimiento injustificado en las partidas de gasto burocrático y, diferencias significativas entre los montos aprobados y ejercidos.
El Informe Estatal del Ejercicio del Gasto (IEEG) 2020 realizado por el IMCO, que analiza las principales partidas y variaciones del gasto público de los 32 poderes ejecutivos estatales, señala que de los 50 mil 620 mdp que gastó la entidad potosina, el 59 por ciento se destinó a transferencias, asignaciones y subsidios; el 18 por ciento a participaciones y aportaciones; un 5.0 por ciento a la inversión pública; el 1.0 por ciento a la deuda pública. Esto en contraste con el 17.4 por ciento que se destinó para financiar la burocracia; y en este rubro un 16 por ciento fue para servicios personales, el 1.0 por ciento para servicios generales y el 0.4 por ciento para materiales y suministros.
“El gasto administrativo o burocrático se refiere a todas aquellas asignaciones de recursos destinadas a la compra de bienes y servicios necesarios para ejecutar las funciones de gobierno de manera satisfactoria. Esto incluye el pago de sueldos y salarios, honorarios y prestaciones del personal al servicio del Poder Ejecutivo del estado; la compra de insumos y suministros como artículos de oficina, materiales de limpieza, alimentos y utensilios, medicinas, suministros médicos, uniformes, gasolina y diésel; además, el pago de servicios básicos (agua, luz, gas, internet, telefonía fija y celular, etc.), servicios profesionales, viáticos, publicidad oficial, ceremonias oficiales, entre otros”.
El IMCO encontró que en los estados, la mala planeación presupuestal se traduce en incrementos injustificados del gasto administrativo; las entidades no gastan de manera responsable, presupuestan un monto y gastan de forma distinta.
No obstante cabe destacar que, en 2019, San Luis Potosí tuvo un gasto burocrático inferior al de otros 20 estados, aunque superior al de 11 entidades. En ese año el que mayor gasto administrativo tuvo fue la Ciudad de México con 117 mil 314.5 millones de pesos, y el de menor gasto burocrático fue Aguascalientes con 2 mil 257.6 millones de pesos.
En conjunto, entre 2015 y 2019 el gasto administrativo de los poderes ejecutivos estatales aumentó 8.7 por ciento en términos reales, al pasar de 531 mil 918.6 mdp a 687 mil 670.3 mdp. Sin embargo, en ese periodo hubo 19 estados que redujeron su gasto en este concepto, entre ellos San Luis Potosí que se ubica en la sexta posición (junto con Chiapas) al reducir su gasto burocrático un (-)10.2 por ciento. Morelos fue la entidad con mayor disminución del (-)30.6 por ciento.
Según el IMCO, si en 2019 los poderes ejecutivos estatales hubieran gastado lo que dijeron que gastarían en sus presupuestos de egresos, la reducción en el gasto administrativo observada en esos cinco años habría sido mucho mayor; y es que, más de la mitad de los ejecutivos estatales gastaron más de lo aprobado para gasto burocrático, ya que 20 entidades gastaron más de lo que dijeron que iban a gastar y 13 de ellas tuvieron variaciones superiores al 10 por ciento.
Por otro lado, 12 estados de la República (incluido San Luis Potosí) disminuyeron sus montos destinados al gasto burocrático, en relación con lo aprobado al inicio del año. La entidad potosina tuvo una variación a la baja de (-)0.4 por ciento, entre lo aprobado y lo ejercido de manera general para su gasto burocrático.
A detalle el informe revela que San Luis Potosí sólo ejerció un 0.9 por ciento más de lo aprobado en su presupuesto, bajo el concepto de servicios personales; pero en el rubro de materiales y suministros redujo su gasto un (-)15.5 por ciento; y por concepto de servicios generales también redujo su gasto en un (-)12.7 por ciento, en relación con los montos originalmente aprobados por sus respectivos congresos. En cuanto al gasto en publicidad oficial, el poder ejecutivo de San Luis Potosí gastó un (-)6.6 por ciento menos en 2019, para sus servicios de comunicación social y publicidad.
En conclusión, la entidad potosina mantiene cifras aceptables en sus participaciones de gasto público, pues en general no ha tenido incrementos tan marcados en este rubro, a diferencia de entidades como Oaxaca, Jalisco, Nayarit y Morelos que tuvieron mayores variaciones; incluso el IMCO aseguró que si San Luis Potosí hubiera seguido puntualmente su presupuesto aprobado en 2019, el crecimiento hipotético en su gasto entre 2015 y 2019 hubiera sido mayor al observado.
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