La conclusión de la presa La Maroma se postergaría siete meses adicionales a lo que se programó al iniciar los trabajos, reconoció Manuel Téllez Bugarín, director local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
El funcionario federal se refirió a uno de los compromisos presidenciales que quedaron sin cumplir en el mandato de Enrique Peña Nieto, y señaló que siguen las pláticas con opositores a la construcción de la presa La Maroma, “seguimos dándole pie a que entiendan que este proyecto es un proyecto muy importante para el Altiplano, un proyecto que tiene ya muchos años necesitándolo”.
Aseguró que hay avances tanto en los trabajos que ya se llevan a cabo, como en las negociaciones con los inconformes, “que son los menos”, pues se han tenido reuniones con las instancias correspondientes para desahogar el proceso legal que hay en contra del proyecto, en donde incluso los pobladores del ejido La Presa han denunciado falsificación de documentos por parte de las autoridades para poder realizar el proyecto.
Indicó que la Conagua sigue el proceso para “poder demostrar que lo que estamos llevando a cabo los trabajos de la presa cumplen con todos los preceptos y requisitos que se necesitan para llevar a cabo este proyecto”.
Téllez Bugarín señaló que la planta potabilizadora que recibirá el agua de la presa está prácticamente concluida, por lo que los trabajos pudieran finalizar entre febrero y marzo, y en el caso de la presa la nueva fecha tentativa es junio de este año, aunque cabe recordar que ambas obras estaban programas para concluir el 30 de noviembre del año pasado.
En este sistema hidráulico se aplica una inversión superior a los 400 millones de pesos, la presa tendrá una longitud de 126 metros de corona y un ancho de 6 metros, con altura de 51 metros, lo que permitirá almacenar casi 2 millones de metros cúbicos de agua.
El director local de la Conagua recordó que los 200 millones de pesos que faltaban por invertir para la conclusión de este proyecto ya fueron asignados por el Gobierno Federal el año pasado, por lo que el recurso está garantizado.