Redes sociales no son culpables de dañar al Servicio Postal: Gustavo Gordoa

El problema que enfrentan Correros de México y los filatelistas, no fue originado por las redes sociales, sino porque en México y en general en Latinoamérica no se tiene el hábito de leer y escribir, indicó Gustavo Adolfo Gordoa, representante de la Sociedad Filatélica Potosina.

Este miércoles se llevó a cabo el acto protocolario de cancelación de primer día de la estampilla “450 años de la traducción de la Biblia al Castellano”, por lo ya está a la venta al público; se emitirán 200 mil de estas estampillas.

Durante el evento, Nelsa López Hernández, gerente Postal Estatal, aseguró que “Correos de México está vivo”, y señaló que la institución trabaja porque el envío de cartas sea parte de la cultura de los ciudadanos, pues destacó que este hábito ayuda a mejorar la caligrafía y la ortografía de los niños, en quienes ya se han encontrado problemas como el hecho de escribir “abreviaturas” que utilizan en las redes sociales.

Aparte, Gustavo Adolfo Gordoa indicó que la filatelia no puede existir sin Correros de México ya que es quien los provee de material, además mencionó que existen muchos temas con los que se pueden realizar estampillas, tan solo durante el año pasado hubo algunas de futbol con la Selección Mexicana, flora, fauna e incluso de Navidad.

Manifestó que a través de las estampillas postales se puede conocer al país, pues en ellas se muestra la flora y fauna del país, así como actividades propias de cada región y otros temas, sin embargo indicó que hay alrededor de 400 países que emiten estampillas y que abordan temas más diversos, por ejemplo en España se han emitido estampillas de la Guerra de las Galaxias y de Harry Potter.

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Señaló que en otros países hay más filatelistas debido a que sigue en uso el servicio postal, pues tienen más arraigado el hábito de la lectura, mientras que “en los países latinoamericanos el gran problema que tenemos es que no se lee, no se escribe, no es tanto por las redes sociales”.

Por lo pronto, aunque ha disminuido el envío de cartas, servicios bancarios y de telefonía, así como el envío de paquetes, han mantenido activo al servicio postal mexicano.