Establecimientos con venta de artículos y armas deportivas reportan incremento variable en lo que va del año, en la venta de armas de municiones, que usan como medida de prevención y defensa ante la comisión de algunos delitos, puesto que el victimario difícilmente podría darse cuenta de que no se trata de un arma de verdad.
La afluencia de visitantes a estos establecimientos varía en función a los eventos de inseguridad que se publican en redes sociales y medios de comunicación, registrando “picos”, según las actividades delictivas que se susciten.
Personal de estos establecimientos dieron a conocer que al mes se acercan entre 12 y 15 personas interesadas en adquirir un arma deportiva asesorándose cuál sería la de mayor conveniencia para “prevenir o defenderse” de algún delito.
Del total de las personas que se acercan a pedir informes, al mes se concreta la compra de una o dos armas, cuyo costo varía entre mil y 2 mil pesos, “la gente viene y pregunta por la mejor opción, regularmente llevan armas cortas que son de un solo disparo pero que al disparar se emite un sonido similar al de una arma de fuego real”.
Si en un evento el cliente usa el arma, la otra persona el delincuente si pude pensar que se trate de un arma de fuego por el sonido que emite y que además visualmente son muy similares.
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