Debido a que la temporada de producción de mangos está terminando, comprar un kilo de este fruto ya es un “lujo”, pues se está vendiendo a más de 50 pesos; en contraste, la temporada de producción de mandarina apenas está comenzando, por lo que su precio cada vez es más accesible, de estar en 25 pesos el kilo, ahora éste se comercializa en entre los 16 y 18 pesos.
Informó lo anterior el presidente del Patronato del Centro de Abastos, José Luis Olivares Robles, quien explicó con el cambio de temporada de verano a otoño, los precios de algunos productos de consumo básico se modifican, ya sea que incrementen porque empieza a bajar su producción o que disminuyan porque crece la producción.
Aunque son contados los productos que han aumentado su precio, dijo, hay algunos que sí generan un impacto en el bolsillo de los consumidores, porque “son insustituibles en la dieta de los mexicanos”.
Por ejemplo, el tomate y la cebolla ambos pasaron de los 16 a los 24 pesos por kilo; los chiles frescos como el serrano, el jalapeño y el poblano están sobre los 25 pesos el kilo; el arroz que antes se vendía entre los 18 y 20 pesos por kilo, y hoy se oferta desde los 25 hasta los 35 pesos, dependiendo de la calidad; y de las frutas la papaya también subió hasta los 25 pesos el kilo.
Sin embargo, los productos que se mantienen en un precio estable son el huevo, el aguacate, la naranja, la papa y el frijol.
Finalmente señaló que con el cambio en el semáforo epidemiológico, de color naranja a amarillo, esperan que las ventas puedan crecer por lo menos un 10 o 15 por ciento, ya que los distintos sectores económicos empezarán a tener mayor actividad.
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