Una vez que se migre hacia el nuevo edificio del Hospital Central "Dr. Ignacio Morones Prieto", cambiarían de manera drástica muchas de las circunstancias del trabajo médico y la comodidad de los pacientes, consideró la directora médica de la institución, Martha G. Rangel Charqueño.
La responsable del área médica de este centro de salud, reconoció que están a la espera de que pronto sea una realidad el cambio de edificio de esta sede, no obstante que aún no reciben el equipamiento necesario a fin de poder hacer operativo la nueva estructura en donde se requieren incluso camas para el internamiento de pacientes, incluyendo personal médico, entre muchas otras cosas.
“Nos ayudarían los espacios, pero nosotros damos la misma atención de calidad, seguimos funcionando igual, con el propósito de que nos pacientes reciban la mejor atención médica, pero sí nos cambiamos a las nuevas instalaciones, obviamente van a ser instalaciones más amplias con mayor comodidad médica”.
Sin embargo, dijo, hay optimismo ante las señales que ha brindado la nueva administración estatal a fin de realizar las gestiones para que el gobierno federal cumpla con los compromisos en este sentido, e incluso ante la posibilidad de lograr en definitiva la federalización del servicio médico que le dará certeza tanto a pacientes como al personal de la institución médica.
No hay una definición de cuándo se daría el cambio al nuevo edificio pues es un asunto que le compete a la federación, pero reiteró que los servicios médicos se siguen ofreciendo a la ciudadanía local.
Reconoció que a partir del mes de octubre del año pasado, el Hospital Central, considerado como nosocomio regional, se reactivó después de la contingencia sanitaria por Covid-19, es por eso que desde ese tiempo se han ofrecido las consultas externas a pacientes que así lo demanden.