A raíz del inicio de la obras de rehabilitación en la calle de Guerrero, por lo menos tres o cuatro negocios se encuentran en una fase complicada debido a que sus ventas han bajado hasta un 70 por ciento o más. Son aproximadamente 30 establecimientos y unas 10 casas habitación que se están viendo afectadas por los trabajos que comenzaron desde enero de este año y a la fecha no han sido concluidos.
Por ello, comerciantes de la zona en apoyo con la asociación Nuestro Centro exigen a las autoridades, principalmente a la Secretaría de Desarrollo Urbano, Vivienda y Obras Públicas (SEDUVOP) que es la encargada del proyecto, que den agilidad a los trabajos y entreguen la calle terminada a la brevedad posible, pues quieren evitar más daños.
El presidente de Nuestro Centro, Alberto Narváez Arochi, señaló que varios locales cerraron sus puertas temporalmente por la incomodidad que les han causado las obras, además su mercancía se les llenaba de tierra, pero al dejar de percibir un ingreso se les ha vuelto complicado sostener sus negocios.
Por si fuera poco, comentó que a falta de alumbrado y vigilancia en la zona los hechos de vandalismo se incrementaron, ya que a varios comerciantes les han grafiteado las paredes y las cortinas de los negocios.
“Estamos sufriendo de mucha inseguridad, ya empezaron con los grafitis pero ahorita lo que podría seguir es un asalto o que nos abran nuestros negocios, porque no tenemos la vigilancia necesaria, como la calle está cerrada no es posible que pasen las patrullas y tampoco tenemos alumbrado. También hay una señora que tiene un comercio en la calle y que va en silla de ruedas, desde que empezó la obra no ha podido abrir su negocio porque ella entra en silla de ruedas a vender”, dijo Liliana Rangel, comerciante de la zona.
Narváez Arochi recordó que se les había indicado que la obra estaría lista para Semana Santa, pero recientemente se dio a conocer que el acuerdo con las constructoras es hasta junio de este año; por ello apuntó que mientras no haya garantía ni compromiso por parte de la autoridad Nuestro Centro no les acompañará para las siguientes obras, no tratarán de impedirlas, pero no quieren ser “parte de una comparsa de algo que después no se cumple”.
“No se vale que la autoridad diga que fue la constructora, ella es responsable de la obra y tiene los elementos necesarios para exigirle a la constructora que acabe en tiempo, lo que queremos es la garantía de la autoridad de que se va a cumplir en el tiempo en que se establece”, expresó.
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